Un grupo de científicos descubrió que varios tipos de juguetes sexuales pueden desprender microplásticos y otras sustancias químicas peligrosas que dañan la fertilidad.
Los expertos descubrieron que cuatro tipos de juguetes sexuales (vibradores duales, vibradores externos, juguetes anales y cuentas anales) contienen ftalatos, sustancias químicas que, en altas concentraciones, se sabe que causan daños al hígado, los riñones y el sistema reproductivo, de acuerdo con un estudio publicado en la revista especializada Microplasticcs y Nanoplastics.
Los químicos que se encontraron en los juguetes sexuales se hallaron en niveles superiores indicados en las reglamentaciones de Estados Unidos y los estándares de la Unión Europea de juguetes para niños. También se descubrió que los juguetes íntimos depositan fragmentos de nanoplásticos después de frotarlos y rasparlos mecánicamente.
Los juguetes sexuales son cada vez más populares en muchos países del mundo. En Estados Unidos, por ejemplo, más de la mitad de las mujeres heterosexuales y poco menos de la mitad de los hombres heterosexuales, de entre 18 y 60 años, han usado un vibrador. Mientras, que 79.7 por ciento de las mujeres lesbianas y bisexuales, y 78.5 de los hombres homosexuales o bisexuales, han usado un juguete sexual.
¿CÓMO LOS JUGUETES SEXUALES DAÑAN LA FERTILIDAD?
Se prevé que el mercado de productos sexuales alcance los 50,000 millones de dólares en 2025. Muchos países vieron grandes aumentos en las compras de estos artículos durante los aislamientos sociales por la pandemia del covid-19.
Los autores del estudio de Microplastics y Nanoplastics hicieron pruebas con el contenido de ftalatos de los juguetes y descubrieron que todos contenían diferentes niveles de sustancias químicas.
Los ftalatos son sustancias químicas que se utilizan para hacer que los plásticos sean más duraderos. Se encuentran en una amplia gama de productos, desde pisos de vinilo hasta jabones y champús, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos.
Una gran cantidad de personas están expuestas a los ftalatos de los juguetes sexuales, y aunque los efectos exactos en el cuerpo humano no están claros, algunos estudios en roedores han encontrado que pueden afectar la fertilidad y el sistema reproductivo.
“Algunos de los ftalatos identificados en nuestros experimentos se han observado, en altas concentraciones, a la par de complicaciones graves de fertilidad o pérdida de fertilidad en roedores”, escribieron los autores en el artículo.
“Aunque es posible que no se haya demostrado la causalidad, la correlación es lo suficientemente preocupante como para justificar una investigación más amplia“, indicaron los científicos.
EL USO DE FTALATOS ESTÁ POCO REGULADO
Actualmente, la Comisión de Seguridad de Productos del Consumidor de Estados Unidos no exige que los productos que contengan tales sustancias químicas adviertan al usuario en la etiqueta.
Algunos de los juguetes en el estudio fueron etiquetados como “libres de ftalatos”, pero se encontró que sí contenían estos químicos. Y otros poseían concentraciones de ftalatos que excedían los estándares regulatorios de Estados Unidos y de la Unión Europea para productos similares, como juguetes para niños.
“Afirmamos que, dado que la presencia medida de ftalatos en nuestro pequeño tamaño de muestra excede el límite de exposición —de más del 0.1 por ciento del peso del producto— de estos mismos químicos en las regulaciones de la Comisión de Seguridad de Productos del Consumidor (CPSC) de Estados Unidos para juguetes para niños, las investigaciones sobre si los escenarios de riesgo también son similares son prudentes para proteger la salud pública”, escribieron los autores.
Los científicos afirman que se necesita más investigación sobre cómo las membranas mucosas de la vagina y el recto absorben los ftalatos, ya que se ha investigado muy poco en ese campo específico.
“Este estudio también revela la necesidad de una exploración más representativa que abarque la exposición a microplásticos y químicos de los productos para el bienestar sexual y los productos femeninos”, concluyeron los autores.
LOS JUGUETES SEXUALES LIBERAN MICROPLÁSTICOS
También probaron cómo los cuatro tipos de juguetes liberan microplásticos y nanoplásticos después de usar una máquina de abrasión, que no imita exactamente el uso típico, pero representa una prueba rápida de uso a largo plazo.
Descubrieron que todos los juguetes liberaron plástico después de su uso, y el juguete anal producía la mayor cantidad de fragmentos, seguido de las cuentas, luego el vibrador dual y, por último, el vibrador externo.
“Estos datos respaldan que, a medida que el producto se desgastó con un método estándar de abrasión de productos, se generaron microplásticos. E indican que alguna fracción de nanoplásticos estuvo presente en cada muestra de juguete sexual analizada, lo que sugiere la posibilidad de exposición a materiales peligrosos en condiciones de abrasión“, escribieron los autores del estudio.
“También es importante tener en cuenta la tasa de descomposición de los materiales de estos productos, ya que, si en el futuro se demuestra que la descomposición del material ocurre en condiciones de uso realista, esto indicaría que los materiales resultantes podrían estar directamente en contacto con tejidos sensibles debido a que esta clase de productos está diseñada específicamente para escenarios de uso que involucran partes sensibles del cuerpo”. N