Una historia breve de los superhéroes negros modernos, desde Paul Robeson hasta Black Panther.
Incluso antes de su llegada a los cines, Black Panther estaba en camino de ser una de las más grandes películas de superhéroes en la historia, gracias a los niveles récord de boletos en preventa. Pero siendo la primera entrega del Universo Cinematográfico Marvel en presentar un superhéroe negro protagonista (apareció primero en Capitán América: Civil War, de 2016), la película tiene una importancia que va más allá de la taquilla. “Puedes conectarte con un personaje que no se ve como tú, pero hay un extra aquí para la gente de color”, dijo Ryan Coogler, director de la película, a The Sydney Morning Herald. “La representación es algo que puede ser muy poderoso”.
Introducido en Los Cuatro Fantásticos No. 52 en 1966, Pantera Negra es más que un superhéroe, también es el rey y protector de la nación africana ficticia de Wakanda (edl guionista Ta-Nehisi Coates reinterpretó al personaje y sus raíces africanas para la trama actual del cómic, la cual empezó en 2016). En la película, T’Challa (Chadwick Boseman) asume el trono —y el cargo de Pantera Negra— tras la muerte de su padre. Pero debe repeler un desafío a la corona de parte del revolucionario wakandiano Erik Killmonger (Michael B. Jordan).
Black Panther podría ser la película de un superhéroe de más alto perfil en la historia, pero los personajes (incluida una banda fantástica de mujeres guerreras) no surgieron del vacío. La historia moderna está llena de héroes de color, reales e imaginarios, quienes ayudaron a abrirles paso a la pantalla.
Paul Robeson, The Emperor Jones, 1933
Tal vez sea mejor conocido por cantar “Old Man River” en la película de 1936 Show Boat, pero este fue el papel trascendental de Robeson, interpretando a un botones de coche-cama quien se convierte en el gobernante de una isla caribeña. El poderoso cantante y actor —una estrella cinematográfica con amplio atractivo cuando había cero protagonistas negros en Hollywood— fue el antecesor de Sidney Poitier y Denzel Washington.
Los marchistas por el derecho al voto de Selma a Montgomery, 1965
El metraje de hombres y mujeres negros pacíficos a quienes les impedían marchar por su derecho al voto los escuadrones de policías blancos antimotines le dio vida al movimiento por los derechos civiles. Martin Luther King Jr. encabezó la marcha exitosa al día siguiente, pero la cobertura nacional de la respuesta violenta contra los primeros marchistas transformó a un grupo de estadounidenses comunes (entre ellos el futuro congresista federal John Lewis) en superhéroes de la vida real.
Las Panteras Negras, 1966
Un cambio radical en el movimiento por los derechos civiles ocurrió cuando el Partido de la Pantera Negra salió a las calles de Oakland, California. Las Panteras —con su uniforme de soldados urbanos de boinas negras, lentes oscuros y chamarras de cuero— animaron a las comunidades negras en todo el mundo.
Sidney Poitier, Al calor de la noche, 1967
Cuatro años después de convertirse en el primer negro en ganar el Óscar al mejor actor, por Los lirios del valle, Poitier interpretó al detective policiaco, norteño y nada sumiso, Virgil Tibbs. Una frase, dicha al prejuicioso jefe sureño de la policía interpretado por Rod Steiger, se convirtió en un eslogan del desafío dignificado: “¡Me llaman Señor Tibbs!”.
Eartha Kitt, Batman, 1967-1968
Tres actrices —dos blancas y una negra— interpretaron a Gatúbela, la némesis/interés romántico de Batman en la chabacana serie de televisión y la película de la década de 1960. Todas eran seductoramente feroces, pero solo la versión de Kitt fue transformadora.
Sweet Sweetback’s Baadasssss Song, 1971
Huey Newton, cofundador de las Panteras Negras, la llamó “la primera película negra en verdad revolucionaria”. Escrita, dirigida y estelarizada por Melvin Van Peebles, Sweet Sweetback se convirtió en el patrón no solo del género blaxploitation, sino de un estilo totalmente nuevo de altanero héroe urbano.
Richard Roundtree, Shaft, 1971
La película lanzó el blaxploitation a la estratósfera, y la calma natural de la estrella Roundtree le dio al detective privado John Shaft un caché innegable que rebasó las barreras culturales. Pero fue su desafío justificado a la autoridad —incluido el escupir en la cara a policías blancos— lo que hizo al personaje una leyenda del empoderamiento.
Cleopatra Jones, 1973
Tamara Dobson —la “respuesta de la hermana del soul a James Bond”— caza a un rey blanco de las drogas en una de las películas más imborrables (y baratas) del blaxploitation. Pero al contrario de Coffy (1973) y Foxy Brown (1974), Jones se trataba de una elegancia cabrona en vez de justicieras excitantes.
Raíces, 1977
El personaje central, Kunta Kinte (interpretado por LeVar Burton y John Amos), era un esclavo gambiano llevado a las colonias americanas en el siglo XVIII. El evento televisivo enormemente popular daba una representación franca de la esclavitud (una revelación para muchos blancos estadounidenses), pero fue la lucha de Kinte por conservar su identidad lo que hizo a Raíces uno de los más grandes viajes del héroe.
Miami Vice, 1984
La estrella del programa era Don Johnson, pero fue Philip Michael Thomas, como el detective Ricardo Tubbs, quien trajo algo nuevo a la televisión: una figura de color con autoridad imbuida de voluntad y pasiones, un Virgil Tibbs para un Estados Unidos a la vuelta de la esquina.
The Meteor Man, 1993
La primera película en presentar un superhéroe negro en el papel principal era una parodia del género, escrita, dirigida y estelarizada por Robert Townsend. La película destrozada por la crítica —sobre un hombre que obtiene poderes extraordinarios después de ser golpeado por un trozo de un meteoro— ahora es una favorita de culto.
Spawn, 1997
Spawn podrá ser una película malísima, pero fue la primera adaptación de un importante superhéroe negro de cómics (adelantándose en los cines a El ángel de acero por dos semanas), abriéndole la puerta a una representación equitativa en el género.
El ángel de acero, 1997
Después de la muerte de Superman en los cómics en 1992, cuatro remplazos trataron de tomar su lugar. Uno era Steel, también conocido como John Henry Irons, un trabajador negro de la construcción que usaba una armadura y portaba un martillo grande. Cinco años después, Shaquille O’Neal, superfán de Superman, llevó El ángel de acero a la pantalla grande; fue un petardo mediocre, pero un paso gigantesco adelante para las principales editoriales de cómics y su disposición a adaptar personajes de color.
Pam Grier, Jackie Brown, 1997
Más de 30 años después de Coffy y Foxy Brown, la actriz Pam Grier interpretó a otra dama dura que flirtea con el peligro en los márgenes de la sociedad respetable. Pero al contrario de sus películas de la década de 1970, el homenaje de Quentin Tarantino al blaxploitation mostraba una heroína que no necesitaba recurrir a tácticas de porno suave.
Blade, 1998
Wesley Snipes interpretó al cazador de vampiros diurno de Marvel, elevando a un héroe de clase B al estatus de clase A 0 años antes de que Robert Downey Jr. hiciera lo mismo con Iron Man. Blade no lanzó un universo cinematográfico, pero en un mundo posterior a Batman & Robin, hizo que las salas múltiples fueran seguras para los superhéroes de nuevo (X-Men se estrenó dos años después, seguida por Spider-Man en 2002).
Halle Berry, Catwoman, 2004
Aun cuando Berry tuvo tiempo en pantalla como Tormenta en las películas de X-Men, esta le dio a la ganadora del Óscar un papel que cambiaría su imagen. Sí, Catwoman fue una mediocridad épica, pero siendo la primera película de superhéroes protagonizada por una mujer negra, también fue una acción audaz para Hollywood.
Star Wars: El despertar de la fuerza, 2015
Lando Calrissian (Billy Dee Williams) y Mace Windu (Samuel L. Jackson) son cruciales para la saga de Star Wars, pero fueron personajes secundarios. Finn, el stormtrooper convertido en héroe de la resistencia (interpretado por John Boyega), está al frente y al centro, tan vital en la aventura como Rey, Kylo Ren o Poe Dameron. Un cambio cósmico en la representación en una galaxia muy, muy lejana.
Luke Cage, 2016
Luke Cage —Poderoso, Héroe de Alquiler— debutó en los cómics de Marvel en 1972 en la cúspide de la moda del blaxploitation. Todo el bagaje racialmente ambiguo de esa era fue eliminado cuando Mike Colter le dio vida a Cage en múltiples programas de Netflix más de 40 años después. La popularidad del personaje (en varios grupos demográficos) dio el primer superhéroe de color complejo en la pantalla chica.
Black Lightning, 2018
Relámpago Negro (Cress Williams), el personaje de DC Comics, podrá ser la estrella de este programa de CW, pero es su hija Anissa (Nafessa Williams) quien es la inconformista aquí: la superheroína negra —ella combate al crimen como Thunder— también es lesbiana, una línea de representación que el género rara vez toca, ya no digamos que la cruce.
—
Publicado en cooperación con Newsweek / Published in cooperation with Newsweek