Más de 2 millones de muertes y 4.3 billones de dólares en pérdidas económicas dejó en los últimos 50 años el clima extremo “turboalimentado por el calentamiento global provocado por el hombre”, informó este lunes 22 de mayo la Organización Meteorológica Mundial (OMM).
Según la OMM, los eventos extremos relacionados con el clima y el agua causaron 11,778 desastres reportados entre 1970 y 2021. Pero la mejora de las alertas tempranas y la gestión coordinada de desastres ha reducido el número de víctimas humanas en el último medio siglo. Más del 90 por ciento de las muertes reportadas en todo el mundo ocurrieron en países en desarrollo.
LOS PAÍSES MENOS ADELANTADOS, LOS MÁS AFECTADOS POR EL CLIMA EXTREMO
Solo en Estados Unidos, indica, se perdieron 1.7 billones de dólares, lo que representa el 39 por ciento de las pérdidas económicas en todo el mundo en los 51 años. Pero los países menos adelantados y los pequeños Estados insulares en desarrollo sufrieron un costo desproporcionadamente alto en relación con el tamaño de sus economías.
La OMM emitió los nuevos hallazgos para el Congreso Meteorológico Mundial cuatrienal, que se abrió este 22 de mayo con un diálogo de alto nivel sobre la aceleración y ampliación de la acción para garantizar que los servicios de alerta temprana lleguen a todos en la Tierra a finales de 2027.
La iniciativa de Alertas Tempranas para Todos de las Naciones Unidas es una de las principales prioridades estratégicas que debe ser respaldada por el Congreso Meteorológico Mundial, el principal órgano de toma de decisiones de la OMM.
LA TORMENTA MOCHA, UN EJEMPLO DE CATÁSTROFE
La sesión de alto nivel será inaugurada por el presidente suizo Alain Berset y reunirá a los principales representantes de las agencias de las Naciones Unidas, los bancos de desarrollo, los gobiernos y los servicios meteorológicos e hidrológicos nacionales responsables de emitir alertas tempranas. “Desafortunadamente, las comunidades más vulnerables son las más afectadas por el clima y los peligros relacionados con el agua”, dijo el Secretario General de la OMM, el profesor Petteri Taalas.
“La tormenta ciclónica extremadamente severa Mocha ejemplifica esto. Causó una devastación generalizada en Myanmar y Bangladesh, afectando a los más pobres de los pobres. En el pasado, tanto Myanmar como Bangladesh sufrieron decenas e incluso cientos de miles de muertes. Gracias a las alertas tempranas y a la gestión de desastres, estas tasas de mortalidad catastrófica son ahora, afortunadamente, historia. Las primeras advertencias salvan vidas”, añadió.
Las muertes registradas para 2020 y 2021 (22,608 muertes en total) indican una mayor disminución de la mortalidad en relación con el promedio anual de la década anterior. Las pérdidas económicas aumentaron, la mayoría de ellas atribuidas a la categoría de tormentas. N