El entrenador mexicano de futbol, Javier Aguirre, se presentará ante la justicia española por el caso del amaño de un partido entre Levante y Zaragoza –el equipo que dirigía–, durante la temporada 2010-2011.
Según el medio valenciano Las Provincias, la juez del Juzgado de instrumentación número 8, Isabel Rodríguez, cerró la investigación, pero hace un par de semanas se reabrió el caso a instancia de la Audiencia Provincial, debido a que para la juez no se ha justificado el destino de las transferencia que recibieron los jugadores del Zaragoza.
Cuando estalló el caso en 2015, la Fiscalía investigaba si el equipo del que Aguirre era entrenador, pagó 1.2 millones de dólares para que el Levante se dejara ganar (1-2) y que permitiera la permanencia del conjunto aragonés en Primera División.
Junto con Aguirre y el expresidente del club, Agapito Iglesias, los jugadores investigados por el Zaragoza son el paraguayo Paulo da Silva, los argentinos Leonardo Ponzio y Nicolás Bertolo, el uruguayo Carlos Diogo y el nigeriano Ikechukwu Uche, entre otros.
De acuerdo con la versión de la Fiscalía citada por Marca, el dinero ingresó en las cuentas de varios jugadores de Levante, quienes habrían sacado y devuelto a sus directivos. Después de otra victoria, pero contra el Ciutat de València, los jugadores de aquella plantilla del Levante habrían pasado un verano casi sin tocar un euro de sus cuentas corrientes.
Una prueba pericial, continúa el medio, demostró la enorme diferencia de gasto que tuvieron estos jugadores entre el verano de 2010 y el de 2011, en el que el fiscal sospecha que cobraron el dinero negro que provenía del amaño.
Tras el anuncio de la investigación, las autoridades de futbol japonesas, en la liga en que participaba como entrenador, anunciaron la destitución del seleccionador nacional. “No debemos correr el riesgo de que estas cosas afecten las eliminatorias en Asia para el Mundial”, dijo el presidente de la Asociación de Fútbol japonesa, Kuniya Daini, en una rueda de prensa televisada.