Hasta hace algunas décadas la enseñanza superior en línea era rechazada y minimizada frente al alto reconocimiento que tenía la educación presencial. Actualmente, el aprendizaje online no solo simplifica la vida de millones de personas que estudian y trabajan, sino que se ha colocado al mismo nivel de la educación dentro de las aulas, incluso con mayores ventajas.
“Una de las principales diferencias entre la educación en línea y la presencial es la modalidad de la entrega de información y del intercambio de la experiencia educativa entre el docente y el estudiante”, comenta en entrevista con Newsweek en Español el doctor Melchor Sánchez Mendiola, titular de la Coordinación de Universidad Abierta, Innovación Educativa y Educación a Distancia (CUAIEED) de la UNAM. “Sin embargo, en concreto, la educación como proceso de enseñanza-aprendizaje es una sola cosa, y la diferencia entre modalidades es cada vez más borrosa porque incluso las clases presenciales terminan beneficiándose de la tecnología para facilitar el aprendizaje”.
Sánchez Mendiola explica que la ventaja más reconocida de la educación en línea es la disminución del desplazamiento físico que elimina las distancias geográficas. No obstante, resalta, cuando se estudia vía remota los maestros examinan el pensamiento de los estudiantes y no solamente sus rostros porque el arma secreta de este tipo de enseñanza es la realización de actividades asincrónicas —que no son en tiempo real—. Con ello, los estudiantes tienen el tiempo de llevar a cabo actividades de aprendizaje y las tareas en los periodos que se acomoden a su horario personal, y lo hacen con mayor calma y entrega.
VENTAJAS DE LA EDUCACIÓN EN LÍNEA
“Lo asincrónico permite que la gente piense más, que reflexione aún más todo lo que está aprendiendo. Esto se llama metacognición, es decir, tener un mayor control del conocimiento, concienciación, control y naturaleza de los procesos de aprendizaje derivado de tener más tiempo para su educación”, añade el doctor Sánchez Mendiola.
A su vez, señala que vía online los maestros pueden atender de manera más efectiva y eficiente a grupos más grandes de estudiantes porque recurren al apoyo de la tecnología, y en lugar de enseñar a 50 alumnos pueden atender a 200.
Además, con las nuevas herramientas tecnológicas, incluida la inteligencia artificial generativa, un profesor puede aportar mayores conocimientos de manera satisfactoria a más estudiantes, que es muy difícil de lograr con grupos grandes cara a cara de manera simultánea.
“Los costos también son una ventaja a resaltar. Generalmente, en todas las escuelas donde se imparte educación superior en línea el costo es menor al de la presencial por una serie de factores, entre ellos, que no se requiere un edificio y todo lo que implica mantenerlo, mientras que los estudiantes pueden estar en cualquier sitio que deseen para tomar las clases”, explica el doctor.
Sánchez Mendiola, también experto en evaluación educativa, señala que una ventaja a resaltar de la educación en línea es la enorme disponibilidad del material digital que existe actualmente.
“Por ejemplo, en la UNAM todos los estudiantes y profesores tienen acceso a la biblioteca digital de la universidad, la cual tiene más de 1 millón de recursos digitales educativos, de tal manera que el estudiante puede tener acceso a todos esos recursos desde donde quiera, sin tener que ir a la biblioteca y pedir prestados los libros o sacar copias”, añade.
UNA PERCEPCIÓN SOCIAL ERRÓNEA
Pese a las grandes ventajas, dice el doctor Sánchez, la educación en línea todavía sigue siendo rechazada por una parte de la sociedad que considera que “no es lo mismo que la presencial y que es de menor calidad”. Sin embargo, añade, existe una enorme cantidad de reportes —incluso antes de la pandemia— que indican que la educación en línea bien llevada, o la educación híbrida, son tan efectivas, o más, que la educación cara a cara por sí sola.
Existe esta percepción social errónea de que, por ser más barata, la educación en línea es de menor calidad, explica Sánchez Mendiola, quien también puntualiza que, como desafortunadamente cualquier persona puede usar su computadora, dar cursos y armar “supuestas actividades educativas”, existe el riesgo de tener malas experiencias con la educación en línea, por ello aconseja investigar a profundidad la institución que imparte este tipo de enseñanza.
“A veces también se tiene la idea de que ver de manera física a los compañeros y maestros es parte de la calidad de la educación, y esto es erróneo. Yo hice mi maestría en educación en modalidad en línea y tuve compañeros de los cinco continentes y fue de calidad. Además, mi título no dice que fue en línea. Con ello quiero decir que cada vez hay más reconocimiento de que la educación en línea y presencial son equivalentes, y los títulos que dan las universidades son los mismos tanto para las carreras online como para las de forma presencial”, indica.
¿SE APRENDE MENOS EN LA EDUCACIÓN EN LÍNEA?
En la actualidad aún existe el pensamiento de que la educación en línea no aporta los conocimientos óptimos. Sin embargo, para el doctor Sánchez esa idea es un mito: “Hay cientos de trabajos de investigación experimentales con grupos que documentan que se aprende igual en ambas modalidades; incluso, en algunos resultados la online sobresale, siempre y cuando se imparta con calidad”.
No se debe dejar de tomar en cuenta, agrega, que la amplia gama de ofertas estudiantiles en línea también aporta el beneficio de prepararse con cursos, diplomados, posgrados o seminarios en la profesión que se tenga, lo cual amplía no solo la preparación, sino que aporta microcredenciales que ayudan a crecer en lo laboral.
Mientras tanto, para el doctor en pedagogía Carlos Aguilar Herrera, aunque la educación en línea resulta efectiva, aún falta mucho camino por recorrer para alcanzar modelos educativos cien por ciento eficaces que demuestren que la enseñanza donde el profesor se para frente a un grupo no es la única ni tampoco necesariamente la mejor. Ello porque “muchas veces en la educación presencial los alumnos son pasivos, solamente escuchan y reciben lo que el docente aporta. Y en la enseñanza en línea también están obligados a investigar un poco más”.
FALTA CAPACITACIÓN
Sin embargo, el pedagogo comenta a Newsweek en Español que todavía falta capacitación tanto estudiantil como docente para poder desarrollar una educación en línea de calidad: “Porque algunos maestros que imparten clases de manera online solamente trasladan su modelo presencial a la computadora, cuando se trata de tener otro tipo de estrategias educativas”.
Al parecer, añade Aguilar Herrera, en el caso de México todavía se vive un proceso de adaptación y “todavía falta mucho camino por recorrer”. Sobre todo, explica, “tenemos que apropiarnos de la tecnología y ponerla en práctica”.
Aparte, “los estudiantes deben hacerse cargo de su propio aprendizaje porque ese es el principio de la educación a distancia, eso también se logra con un cambio de pensamiento generacional, donde incluso se acepte que en el método en línea se debe ser autodidacta”.
PRESENCIAL O EN LÍNEA, QUÉ TIPO DE EDUCACIÓN PREFIEREN LAS EMPRESAS
En ocasiones, a la hora de elegir entre lo presencial o en línea, surge la duda sobre lo que las empresas prefieren en la documentación del profesional que está en busca de un nuevo empleo. Sobre el tema, Alejandra Martínez Campos, responsable de mercadotecnia de empresas y estudios de mercados laboral en Computrabajo, comenta a Newsweek en Español que hoy en día la elección de un candidato no se basa en el tipo de educación que cursó.
“Lo que más importa para los reclutadores es la calidad de la educación, aunada a la relevancia de la experiencia y las habilidades que adquirió el candidato, independientemente de si estudió de forma presencial o en línea. Claro, siempre y cuando demuestre que tiene los conocimientos necesarios para desempeñarse en el puesto y, sobre todo, que sí tiene el perfil profesional que realmente se requiere”, explica Martínez Campos.
A su vez, añade que en los últimos años la modalidad de formación online ha crecido de manera exponencial en todo el mundo. Desde el año 2000 hubo un crecimiento hasta de un 900 por cierto, de acuerdo con un estudio de la Universidad de La Rioja, en España. En el caso de Latinoamérica, la Online Business School (OBS) indica que la educación en línea tendrá un crecimiento anual estimado de 7.6 por ciento.
Martínez Campos cita también un estudio reciente de la Asociación Mexicana de Internet que, menciona, analiza el comportamiento de los usuarios en términos de educación en línea, y “arroja que más de 70 por ciento de los encuestados manifestaron tener interés en la educación online”. Por ello existen algunas carreras que han tenido un mayor crecimiento y una mayor demanda en modalidad en línea.
LAS CLAVES DE LA EDUCACIÓN EN LÍNEA
Estas carreras son las relacionadas con la administración de empresas, la mercadotecnia, la comunicación y, en algunos casos, también las que se asocian con el sector financiero. Martínez Campos también incluye en la lista a las ingenierías en sistemas y programación.
La educación en línea ha adquirido gran relevancia en los últimos tres años, explica Martínez Campos, y señala que está comprobado que puede ser tan eficiente como el usuario lo quiera porque, “al comprometerse con un trabajo y tener las habilidades, se pueden reportar resultados satisfactorios independientemente de la modalidad bajo la que adquirió ese conocimiento”.
Por ello, afirma, la educación en línea sí debe ser una de las más grandes apuestas por parte de las personas, siempre y cuando haya compromiso para adquirir los conocimientos necesarios para finalmente conseguir un empleo en cualquier empresa que requiera de sus servicios.
La educación en formato online de los candidatos ha tenido una creciente importancia debido a elementos clave como la accesibilidad global, pues permite a los aspirantes acceder a una amplia gama de recursos educativos sin importar la ubicación geográfica. A ello se suma, explica, la flexibilidad, pues el alumno aprende a su propio ritmo y adapta su educación a su forma de vida.
La versatilidad también es un elemento clave porque existe una variedad de opciones que permiten a las personas actualizarse constantemente y explorar nuevas habilidades que necesitan desarrollar para ser mayormente competitivas en el mercado laboral. “Lo más importante es que existe una interacción global entre las personas de diversas partes del mundo, lo que les permite una mayor retroalimentación y colaboración entre ellas”, concluye Alejandra Martínez. N