Yucatán mantiene su semáforo en rojo, por el aumento de contagios por el COVID-19, que hasta ayer sumaban 1,976 casos positivos y 234 personas fallecidas; teniendo a Mérida como epicentro de los contagios, sin embargo, las medidas de seguridad parecen relajarse entre la ciudadanía.
En los últimos cuatro días, la cifra de enfermos no ha bajado y los fallecidos siguen acumulándose diariamente, aunque las autoridades de Salud informan que no se rebasa el número de pacientes en camas de hospitales, no se nota una disminución de contagiados.
En las calles ya se observa el aumento de la circulación de los automóviles particulares, incluso por momentos se pierden las medidas de sana distancia establecidas para el transporte público, al menos en lo que respecta a las unidades del FUTV.
Ya no hay retenes policiacos en muchas calles, los cuales se encargaban de la vigilancia estricta, para que no viajaran dos personas en un vehículo y se utilizara el tapabocas.
Muchos comercios no esenciales ya abrieron sus puertas por la urgencia de tener recursos, aunque el semáforo está en rojo, han decidido arriesgarse a trabajar y exponerse al coronavirus, aunque con ellos, sus clientes también están expuestos.