La semana pasada fui invitado por la Fundación Internacional para los Sistemas Electorales, IFES, a colaborar con el Tribunal Supremo Electoral de Guatemala para aportar solución al problema que generó la falla del sistema de resultados preliminares en la primara vuelta electoral. Al entregar los resultados les dije esto, que ahora comparto.
“Magistrado Presidente, Magistrada, Magistrados del Tribunal Supremo Electoral. A Guatemala y a México nos une la historia y las circunstancias, somos barro de una misma arcilla. Hemos recorrido juntos el sentido histórico de nuestros pueblos. Hoy, merced a su invitación a través de Fundación Internacional para los Sistemas Electorales, dignamente representada por Alessandra Rossi, que mucho nos honra, una vez más nos hermanamos en esta experiencia compartida de un espacio de cooperación de organismos electorales. Agradecemos a nombre del pueblo de Mexico y del INE, de nuestro consejero presidente Lorenzo Córdova Vianello, compartir esta experiencia. Aportamos con humildad y con profesionalismo, pero nos llevamos conocimientos intensos de avances en procedimientos de la materia. En el tema electoral las instituciones electorales somos pares, enfrentamos retos y adversidades que se resuelven en el honor de la ley. Tenemos muy claro que los procesos electorales son siempre perfectibles; Ustedes vivirán sus elecciones en el eje de su procedimiento electoral divisa esencial de su democracia. Hemos venido con el ánimo de aprender y aportar, el INE no da lecciones, la experiencia no es del que lo sabe todo, sino de quien permite la posibilidad de que la nueva experiencia sea la novedad que acelere los cambios sociales.
Estamos convencidos que la influencia de los medios de comunicación en la opinión pública es una realidad inconmovible y esencial de las redes sociales en la sociedad actual, en la de todas la naciones, más aún, de las de corte democrático; los administradores y juzgadores de las elecciones sabemos que los medios tradicionales de comunicación y los de nuevo cuño producen connotaciones en diferentes campos. La organización de las elecciones tiene su epicentro en el intercambio de información entre personas, impacta en la ciudadania. Significa volver común un mensaje, una información, un significado. Constituye uno de los procesos fundamentales de la experiencia humana y la organización social. Es una estructura dinámica, altamente maleable a las fuerzas sociales, la cultura, la política, incluso a las estrategias económicas.
La comunicación determina decisivamente la vida compartida, en consecuencia, la tolerancia política; es decir, para el público es muy difícil ver la realidad como es, la entiende como son nuestros lenguajes. Nuestros mensajes son nuestros medios de comunicación. Nuestros medios de comunicación son nuestras metáforas. Nuestras metáforas crean el contenido de nuestra cultura.
La comunicación mediatiza y divulga la cultura y las mismas culturas son profundamente transformadas cada día con más fervor por este nuevo sistema tecnológico. Empero, las culturas, también, están hechas de procesos de comunicación política y procedimental, y todas las formas de comunicación se basan en la producción y el consumo de significados. La comunicación social, de ayer y de hoy, son actores sociales que dependen de códigos culturales compartidos.
Un diagnóstico del estado emocional de la sociedad guatemalteca revela que padece una combinación de emociones y sentimientos como la desconfianza, la desorientación, la desinformación. La primer vuelta de las elecciones en Guatemala, dejó un ruido confuso de información, un cerillismo electoral que incendió la pradera de las percepciones, detengámonos en la revisión del tema, lo que caracteriza a los medios de comunicación social es que son anti-mediadores, intransitivos, arquitectos de la no comunicación; la razón es simple, la comunicación es un intercambio, un espacio recíproco de palabras y de respuestas, por lo tanto, de una responsabilidad, que las instituciones deben asumir como edificio de la nueva era, la comunicación. Es preciso que se responsabilicen de la correlación personal como emisores de la información y el medio para que el significado se comparta al colectivo, en ese intercambio es preciso tres cosas: explicar, explicar, explicar, una pedagogía que agote dudas y desvíe las malas intenciones. El Tribunal Supremo Electoral tiene que ser capaz, en todo momento, de justificarse o transformarse frente a las críticas, legítimas o no, que se le hagan; si no lo puede hacer, si en vez de responder, informar, explicar y volver a explicar, ignora, entonces perderá su legitimidad.
Las elecciones nos dejan grandes lecciones, la pasión política y los procedimientos electorales se concentran en un breve tiempo para aspirar, competir, ganar o perder, bajo reglas que han posibilitado que los votos transiten a gobiernos, alternados, satisfactorios, legítimos, concordantes con el Estado de derecho.
Karla Garduño les presentará las líneas que el Magistrado Presidente sugirió.
Una vez más mil gracias por su hospitalidad y generosidad. Tenemos la certeza que darán Ustedes buenas cuentas al pueblo guatemalteco.”
