Redacción I Pachuca / Con información de Yuvenil Torres y Emmanuel Rincón
Los dos acuerdos que dan como titulares de la Junta de Gobierno del Congreso de Hidalgo a Humberto Veras Godoy y a María Luisa Pérez Perusquía incumplen con disposiciones que marca la Ley Orgánica del Poder Legislativo de Hidalgo.
El primero, impreso en el Periódico Oficial del Estado (POEH) a favor de la priista, no fue leído ante el pleno después de ser votado en la Comisión Instaladora de la Junta de Gobierno, lo que le resta validez, de acuerdo con un análisis a la norma realizado por Criterio.
De acuerdo con el artículo 10 de dicha ley, en su fracción V indica que el día señalado para la celebración de la sesión constitutiva de la Legislatura (el 4 de septiembre), el presidente de la mesa directiva —Humberto Veras Godoy— debe realizar la declaratoria a favor del diputado al que corresponda ser presidente de la Junta de Gobierno.
“Una vez instalada la Legislatura y elegida la primera directiva, deberá comunicarse lo anterior por escrito al Gobernador del Estado, al Presidente del Tribunal Superior de Justicia y al Gobernador Electo, cuando proceda”, señala el ordenamiento.
Así, indica la ley, se remitirá el acuerdo al Poder Ejecutivo del estado, a efecto de que la elección de la directiva se dé a conocer en el POEH.
Por otro lado, el acuerdo leído por la diputada morenista Doralicia Martínez Bautista y votado en el pleno el 12 de septiembre, que otorga la Junta de Gobierno a su compañero Veras Godoy, violó el artículo 98 del ordenamiento legal, pues no fue tomado por dicha Junta.
Dice: “La presidencia de la Junta de Gobierno será ejercida, en forma alternada y para cada año legislativo, por los Coordinadores de los tres Grupos Legislativos que cuenten con el mayor número de diputados. El orden anual para presidir este órgano será en los términos y condiciones que acuerde la mayoría de la Junta de Gobierno”, es decir, los siete integrantes que la conforman actualmente.
De este modo, el acuerdo se debió llevar a cabo, como establece la fracción segunda de dicho artículo, en la “sesión constitutiva”, “para lo cual deberá emitir un acuerdo que contenga su integración por cada año de ejercicio constitucional de la Legislatura, mismo que hará del conocimiento a la Directiva quien informará al Pleno del Congreso del estado”.
La Junta de Gobierno, señala el artículo 97, se conforma por los diputados coordinadores de cada uno de los grupos parlamentarios que se encuentren representados en el Congreso, el presidente de la directiva en turno y, en su caso, por los legisladores de las representaciones partidistas; es decir, los que no tienen bancada, pero sí un instituto político.
DISPUTA POR EL PODER
Los acuerdos de los legisladores liderados por PRI y Morena que dieron como resultado la ostentación de dos presidencias de la Junta de Gobierno en el Congreso local responden a la disputa por el poder político, afirmó el investigador Pablo Vargas González.
El académico consideró que la controversia por el control del ente debe restablecerse en apego a lo que establece la Ley Orgánica del Poder Legislativo; es decir, “no atropellar la ley”, sino que las propias fuerzas políticas se pongan de acuerdo y anteponer el interés público antes del grupal.
“Es fundamental que las fuerzas políticas se pongan de acuerdo, no lo hicieron desde el principio y hoy tenemos las consecuencias. Si no existe una mesa de diálogo, vamos a tener choques y una conflictividad imparable, que es un escenario de improductividad que a nadie conviene”, advirtió.
Remarcó que ninguna de las dos fuerzas políticas en controversia quiere ceder espacio, pues ni la fracción mayoritaria –con 17 legisladores uninominales– ni la minoritaria –con 4 plurinominales y una adherida– quiere sentarse a hablar, lo que impide constituir el Poder Legislativo; por ello, existe indefinición e incertidumbre, lo que calificó como preocupante.
Agregó que si la parálisis legislativa que se ha visto hasta ahora es un retrato de lo que se observará durante los tres años de la legislatura, el escenario podría ser “nefasto” e “improductivo”, donde no habrá “nadie para nadie”.
“Se tienen que visualizar los escenarios de ganar-ganar y para ello tienen que ceder un poco cada una de las fuerzas, privilegiar el diálogo político y trabajar en términos de civilidad, que es lo que ha faltado”, resaltó.
La transición del Poder Legislativo, agregó, no se está llevando a cabo bajo las reglas del diálogo, situación que provoca confrontación y elementos de choque que se alejan de prácticas parlamentarias y del buen gobierno, advirtió.
“Es importante que se respeten las normas por parte de ambas fuerzas, si no estaríamos ante un escenario de choque y de confrontación que sería bastante estéril para la producción de normas y leyes, y que es lo que los hidalguenses están esperando”, dijo.
Recordó que las campañas electorales “ya pasaron”, por lo que los representantes populares deben dar paso al trabajo productivo en la LXIV Legislatura, la primera en la historia de la entidad sin mayoría del partido en el Poder Ejecutivo.
Por su parte, el exdiputado local del PAN Luis Enrique Baños Gómez lamentó que “un acuerdo simple” como era establecer en qué orden presidirán los tres partidos con mayor representatividad la Junta de Gobierno genere tantos problemas en el Congreso.
De acuerdo con el panista, las modificaciones hechas por la LXIII Legislatura el 31 de julio a la Ley Orgánica del Poder Legislativo –calificadas por Morena como albazos– establecen que es la Junta de Gobierno del 4 de septiembre la que debió elegir al presidente del órgano de gobierno por mayoría de los representantes de ese órgano.
En este caso –añadió— “debe persistir el primer acuerdo, porque fue con la presencia de todos los coordinadores”. Aunque el coordinador de Morena, Veras Godoy, no haya firmado el acta, “esto no anula que haya estado presente”, sostuvo.
“Definitivamente, debería subsistir el primer acuerdo. No se está afectando derechos, pues cada partido tendrá la posibilidad de presidir un año la Junta de Gobierno como quedó establecido; no se le están desconociendo diputados a nadie”, aseveró.
Para Baños Gómez, “observando la problemática que se ha generado, se debe llegar a un acuerdo, conciliar, pues la imposición de las mayorías es una práctica pasada”, dijo en referencia a cuando el PRI la tenía.
Sobre la operatividad de la presidencia de la Junta de Gobierno y a quién se subordinarán –si a Pérez Perusquía o a Veras Godoy–, Criterio buscó al secretario de Servicios Legislativos, Eroy Ángeles González, quien no pudo ser localizado por encontrarse “en reuniones”.
Sin embargo, el vocero del Congreso estatal, Fernando Hidalgo Vergara, aseguró que ni las partes administrativas ni operativas se ven afectadas, pues el trabajo se realiza por área.
“Hay una presidenta de la Junta, que es María Luisa Pérez, e independientemente de esto, el recurso para salarios de los trabajadores u otro tipo de operaciones financieras, como insumo de detergentes, papel de baño para los sanitarios, se encuentra presupuestado”, aseveró.