El 16 de febrero de 2018 marca el comienzo del Año Nuevo Lunar, una fecha celebrada durante todo un mes por personas de nacionalidad china en todo el mundo. El centenario festival es un momento para honrar a las deidades, atesorar a la familia y marca inicios.
Pero, ¿qué provocó esta tradición de hace tantas lunas?
Esta es la leyenda de Nian, la bestia mítica que comió niños y comenzó con la tradición del año nuevo chino.
Hace mucho tiempo, una terrible bestia demoníaca llamada Nian habitó las montañas. Cada año, el demonio se despertaba y bajaba furioso a las aldeas cercanas. Se comería todos sus alimentos, el ganado y los granos… y si había niños cerca, Nian también se los comía.
Los aldeanos temían a la bestia y vivían en el terror. Todos los años, durante la época, las familias cerraban sus ventanas y se acurrucaban juntas por la noche, esperando que el monstruo pasara sin asesinarlos ni comerse todas sus cosechas.
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Pero un año, un anciano visitó el pueblo antes de la inminente llegada de Nian. Después de enterarse de los problemas de los aldeanos, les preguntó: “¿Por qué le temen a esta criatura? Hay muchos de ustedes y él es solo uno. Seguramente él no puede matarlos a todos”.
Los aldeanos ignoraron al anciano y se encerraron para pasar la noche, pero esa noche Nian no llegó. El viejo se había llevado a la bestia y lo había montado toda la noche. Por la mañana, el demonio regresó a su cueva muerto de hambre.
El anciano hizo esto por unas noches más, pero en la cuarta noche, les dijo a los aldeanos: “No puedo protegerkis para siempre”. Explicó a la gente que él era un dios y que tenía deberes en otros lugares a los que atender.
Los aldeanos tenían miedo de que el monstruo regresara y le suplicaron al anciano que lo ayudara a derrotarlo.
“No pueden matar al demonio Nian, pero pueden mantenerlo a raya”, dijo el anciano. “La bestia se espanta fácilmente. No le gusta el color rojo. Teme a los ruidos fuertes y a las extrañas criaturas. Así que esta noche, propaguen el rojo a través del pueblo. Cuelguen carteles rojos en cada puerta. Hagan ruidos fuertes con batería, música y fuegos artificiales. Y denle a sus niños máscaras y linternas para protegerlos”.
Durante el mismo mes de todos los años, los aldeanos hicieron lo que el anciano les indicó, y Nian nunca regresó.
En chino, la palabra para Año Nuevo es Gao Nian, que literalmente significa “ignorar Nian” o “vencer a Nian”.
Para protegerse del demonio, los aldeanos colgaron adornos rojos en sus casas y en sus alrededores, llenaron las calles de música y tambores ruidosos e incluso detonaron fuegos artificiales todo el día. Eventualmente, esto se convirtió en una tradición nacional, y así es como China celebra el Año Nuevo Lunar.
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Publicado en cooperación con Newsweek / Published in cooperation with Newsweek