La empresa de origen francés Michelin es una de las compañías más reconocidas a nivel mundial, especializada en la fabricación de neumáticos.
Fundada en 1889, en la actualidad busca promover un derecho fundamental, fuente del progreso humano: la libertad de movimiento, además de impulsar la sostenibilidad en México y en los países donde opera.
De acuerdo con Carla Salamanca, Manager Regional de Sostenibilidad de Michelin México y Centroamérica, el grupo sabe que su plan global de crecimiento debe estar orientado hacia la sostenibilidad.
Por ello, la empresa tiene una estrategia muy ambiciosa de descarbonización para migrar a energías limpias, lo cual han logrado después de trabajar en ello durante más de dos años.
Gracias a esto, Michelin ha logrado disminuir en un 96% las emisiones en sus sitios industriales mediante la utilización de energías limpias.
Además, implementan estrategias agresivas para reducir el consumo de agua en sus procesos productivos.
Por ejemplo, ahora cuentan con un proyecto que les permite ahorrar entre un 30% y un 40% de este líquido en su proceso industrial, aseguró la directiva.
Otra de las fuertes apuestas del grupo es ayudar a diferentes empresas a descarbonizar su transporte y sus cadenas de suministro.
Esto mediante productos diseñados para reducir el consumo de combustible y, por ende, las emisiones de CO2.
Sus neumáticos, con baja resistencia al rodamiento, permiten un ahorro del 3% al 5% en combustible, lo que, multiplicado por grandes flotas, resulta en una significativa reducción de emisiones y costos.
Además, las llantas de camión de Michelin pueden renovarse hasta tres veces, lo que fomenta un sistema de economía circular en México, generando empleo y logrando una reducción del 24% en las emisiones de CO2, un 19% en el consumo de agua y menos residuos.
Por otra parte, Michelin, junto con otras empresas como Veolia, EDF Renewables, Engie y Veolus, encabezadas por la Cámara de Comercio e Industria Franco Mexicana, presentaron propuestas de políticas públicas al gobierno entrante para fortalecer la seguridad energética e hídrica del país.
Estas propuestas buscan que sean sostenibles, seguras, confiables y asequibles, beneficiando el desarrollo industrial y, al mismo tiempo, teniendo un gran impacto positivo para la población en general.
Las propuestas abarcan la transición energética, generación de energía, transmisión de energía, eficiencia energética, energías renovables, bioenergía, geotermia y agua.
En esta iniciativa en la que participan, Salamanca señaló que las empresas y la Cámara propusieron impulsar asociaciones público-privadas para mejorar el tratamiento, recolección, reúso y monitoreo de la calidad del agua en su ciclo completo.
Se sugirió crear políticas que fomenten el reúso de agua tratada en procesos industriales y municipales para reducir el estrés hídrico, así como generar incentivos para la captación de agua pluvial y el reúso de aguas residuales.
En zonas con estrés hídrico, es esencial limitar la descarga de aguas para promover el reúso y establecer requisitos de eficiencia hídrica para las concesiones de agua.
En cuanto a energías renovables, se propuso aprovechar recursos naturales para garantizar precios competitivos y seguridad energética, promoviendo la entrada de empresas privadas en zonas de nearshoring para fortalecer redes de transmisión y asegurar un suministro adecuado de energía limpia.
Además, es crucial garantizar el estado de derecho para inversiones a largo plazo en proyectos renovables, incentivar fiscalmente la generación de energía renovable y fomentar la cooperación internacional para adoptar mejores prácticas en este ámbito, concluyó Carla Salamanca, Manager Regional de Sostenibilidad de Michelin México y Centroamérica.