El Departamento de Estado de Estados Unidos renovó en días pasados su alerta de viaje para sus ciudadanos que pretendan viajar hacia Corea del Norte, exhortándolos a no visitar este país debido al grave riesgo que existe de que puedan ser arrestados o detenidos durante largos periodos.
“El gobierno de EE. UU. no puede proporcionar servicios de emergencia a ciudadanos estadounidenses en Corea del Norte, ya que no tiene relaciones diplomáticas o consulares. Suecia sirve como el poder de protección para los Estados Unidos en Corea del Norte, brindando servicios de emergencia limitados. El gobierno de Corea del Norte habitualmente retrasa o niega el acceso de los funcionarios suecos a los ciudadanos estadounidenses detenidos”, dice la alerta con fecha del 10 de enero.
El Departamento de Estado recomienda a los estadounidenses que logren obtener una validación especial para viajar a esta nación elaborar un testamento y designar a los beneficiarios de seguros, así como discutir un plan con sus seres queridos sobre “cuidado o custodia de niños, mascotas, propiedades, pertenencias, activos no líquidos, deseos funerarios, etc”.
Al menos 16 ciudadanos estadounidenses han sido detenidos en Corea del Norte en los últimos diez años. El caso más reciente es el de Otto Warmbier, un estudiante estadounidense que había estado detenido durante más de un año en Corea del Norte y que falleció el pasado junio en Estados Unidos a los pocos días de haber sido repatriado, en estado de coma. Por ello el gobierno estadounidense pide a sus connacionales recordar que mientras se encuentren en este territorio están sujetos a las leyes de Corea del Norte.
“Si violas las leyes de Corea del Norte, incluso involuntariamente, puedes ser: mantenido en aislamiento sin cargos por largos períodos de tiempo, interrogado sin asesoramiento, obligado a redactar confesiones públicas, procesado, condenado y enviado a un campo de trabajo forzado por años”, se lee en la descripción que hace el Departamento de Estado sobre la situación en Norcorea.
El gobierno estadounidense pide a sus ciudadanos que en caso de ser detenidos o arrestados deben requerir de inmediato a la policía o a los funcionarios penitenciarios norcoreanos que notifiquen su situación a la Embajada de Suecia.
“El sistema legal de Corea del Norte es un instrumento del poder estatal y no una rama independiente del gobierno. Las protecciones garantizadas bajo el sistema legal de los EE. UU. no se aplican, y tu pasaporte de EE. UU. no te confiere un estado especial”, dice la alerta.
El Departamento de Estado explica que en Corea del Norte son delitos el faltar al respeto a los exlíderes del país, Kil Il Sung o Kim Jong Il, así como al actual mandatario, Kim Jong Un. Puede ser considerado como un insulto alterar o manipular materiales que llevan sus nombres o imágenes, como dinero o periódicos o lemas políticos en coreano
También se precisa que son delitos el ingresar a Corea del Norte sin la documentación de viaje adecuada, el poseer material impreso o digital, incluidos lectores de libros electrónicos, DVD, unidades USB, documentos, literatura, archivos de audio y video que sean críticos u hostiles a Corea del Norte, el hacer proselitismo o llevar a cabo actividades religiosas, incluidas actividades que puedan interpretarse como tales, como dejar materiales religiosos, ya sea intencionalmente o no.
Participar en actividades políticas no autorizadas, tener interacción no autorizada con los norcoreanos, tomar fotografías no autorizadas, tener conversaciones no autorizadas con los norcoreanos, viajar sin autorización incluso para distancias cortas, comprar en tiendas no designadas para extranjeros e introducir pornografía al país también son delitos.
Washington precisa que todos los dispositivos electrónicos y multimedia, incluidas unidades USB, CD, DVD, teléfonos móviles, tabletas, computadoras portátiles, historiales de navegación en Internet y cookies, están sujetos a la búsqueda de contenido prohibido. Las posesiones personales en las habitaciones de hotel también pueden ser registradas.