El cambio y la adaptación que ha sufrido el mundo de los negocios ha permitido que hoy en día haya un auge de unicornios, emprendedores que han aprovechado las ventajas de una economía cambiante.
Los emprendedores y las pymes serán las más beneficiadas, ya que podrán aprovechar el reciente auge del capital privado para salir adelante en sus proyectos. Sin embargo, deberán tener en cuenta las diferentes opciones que ofrecen este tipo de inversiones y la viabilidad para su negocio.
El 53 por ciento de los emprendedores que participaron en el reciente estudio de Wortev “Negocios y dinero: panorama de acceso a capital para pymes en México”, señaló que se incrementó drásticamente su necesidad de capital y que se promovió una creciente necesidad de buscar alternativas para capitalizarse.
¿Pero realmente este es el mejor momento para hacerlo?
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Es importante considerar algunos puntos clave que nos permitirán saber si nuestro emprendimiento está realmente listo para levantar capital: 1) validación, 2) capitalización, 3) planeación, 4) estructuración y 5) consolidación y crecimiento de la startup.
La validación de la idea es la mejor etapa, donde un emprendedor puede hacer muchos experimentos y fallar hasta encontrar esa minita de oro y demostrar que nuestra idea se puede vender en el mercado. Capitalización, si ya se está vendiendo mucho, ahora si es el momento de ir por capital.
Planeación, ajusta tu plan de negocio a lo que se ha visualizado en el mercado. Estructuración, con lo que se da formalidad a las diferentes áreas del nuevo negocio.
Consolidación y crecimiento de la startup, el momento en que nuestro emprendimiento está listo para crecer y escalar nuestra idea.
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La situación cambia con startups en etapas más avanzadas. Ahí los motivos para levantar capital privado pueden ser variados. En el último año, el 36.3 por ciento de los emprendedores utilizó financiamiento para expandir su negocio o aumentar su producción. El 18.7 por ciento requirió mejorar su servicio al cliente y calidad. Y el 16.7 por ciento usó capital para su transformación digital.
El principal reto es la dificultad para capitalizarse. De los cerca de 180 fondos de capital privado que existen en México, menos de 30 son de capital emprendedor. Aunado a ello, un gran reto es convencer a los fondos internacionales de invertir en México y Latinoamérica.
En los últimos dos años los fondos internacionales han traído su capital a la región. Es una gran noticia y nos facilita mucho a los emprendedores.
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Es importante tomar en cuenta ciertas consideraciones a la hora de elegir el mejor financiamiento para un negocio e identificar las necesidades de cada emprendimiento. Por ejemplo, si el proyecto está en una etapa inicial el inversionista ángel sería una opción. Pero en el caso de requerir capital y asesoría, habría que considerar la opción de una aceleradora.
Las pymes y los emprendedores en México se enfrentan a un nuevo desafío, el adaptar sus operaciones y estructura financiera para obtener el capital que requieren para que su negocio crezca. N
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Denis Yris es director general de Wortev. Los puntos de vista expresados en este artículo son responsabilidad del autor.