LOS DEFENSORES de migrantes que habían estado negociando con la administración del presidente Joe Biden para poner fin a una regla de la era Trump que impide que la mayoría de los migrantes ingresen a Estados Unidos, han dejado de esperar.
La Unión Estadounidense por las Libertades Civiles, el Proyecto de Derechos Civiles de Texas, Oxfam y RAICES volverán a los tribunales. Planean presentar una orden judicial preliminar para “detener el uso continuo de la ley de salud pública del Título 42” que ha permitido a los agentes fronterizos “expulsar rápidamente a decenas de miles de migrantes y solicitantes de asilo que llegan a la frontera sur”, señalan las organizaciones.
“La administración Biden no nos ha dejado otra opción que volver a la corte. Han pasado siete meses y el Título 42 todavía está vigente”, dijo a NPR Lee Gelernt, abogado de la ACLU. “Creemos que esta es nuestra única opción”.
La administración de Biden ha mantenido la política, citando preocupaciones sobre la pandemia, incluida la explosión de casos de la variante delta contagiosa del coronavirus.
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La nueva ola de casos también llevó a la administración a extender las restricciones a los turistas internacionales de muchos países e imponer nuevos requisitos de vacunas para los trabajadores federales.
La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, dijo el lunes que la administración está remitiendo a los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades si la política es necesaria.
“El presidente lo ve como una medida de salud pública en la que los CDC continuarán brindando orientación sobre cuánto tiempo debe estar en su lugar”, dijo durante la sesión informativa del lunes.
“No hemos dado un cronograma sobre cuándo … levantarán el Título 42, pero los buscaremos para que nos brinden esa orientación”, añadió.
Los CDC emitieron un comunicado donde informaron que mantendría la orden y la revisaría cada 60 días, bajo el argumento de los contagios por las variantes y los riesgos de que el covid-19 se propague en lugares como las estaciones fronterizas.
“La introducción de tales no ciudadanos, independientemente de su país de origen, que migren a través de Canadá y México hacia Estados Unidos crea un grave peligro de introducción de covid-19 en Estados Unidos”, informa el comunicado.
Agrega: “El peligro aumenta tanto con la introducción de tales no ciudadanos que es necesaria una suspensión temporal para proteger la salud pública”. N