La Procuraduría Estatal de Protección al Ambiente (PROESPA) otorgó los primeros certificados de cumplimiento ambiental a siete empresas instaladas en Aguascalientes, que cumplieron con las capacitaciones, talleres y diplomados que los acreditan como compañías responsables en las medidas de cuidado del medio ambiente.

La primera convocatoria de certificación en cumplimiento ambiental fue en 2020, en la que participaron 25 empresas de varios giros productivos, desde la manufactura, la industria automotriz y la elaboración de alimentos, entre otros.

La titular de la PROESPA, Ofelia Castillo Díaz, informó que en total se inscribieron cinco empresas de talla internacional, 18 nacionales y cuatro locales.

“Cualquier empresa puede participar porque todas generan un impacto al ambiente, tenemos grandes, medianas y pequeñas empresas”.

La certificación representa un plus para las empresas que la obtienen, al tiempo que acatan las disposiciones en la materia, evitando así posibles sanciones en el futuro.

“Es un reconocimiento que se da a las empresas por estar cumpliendo con lo que dicta la legislación ambiental en los tres órdenes de gobierno: federal, estatal y municipal, es una forma de trabajar, a través de la procuraduría, de forma preventiva para evitar sanciones”.

Las empresas que ya han logrado su certificación son: AGI Shorewood, Sanoh Industrial, Bebidas Mundiales (Coca-Cola), Cementos y Concretos Nacionales (Cementos Cruz Azul), Flextronics, Nissan Mexicana y Yorozu.

Aunque las irregularidades más difíciles de cumplir por parte de las compañías varían según el giro, pero van desde la falta de acciones para el cuidado del agua, la contaminación del aire o el suelo y la disposición de residuos sólidos urbanos, entre otros.

“A lo mejor hay empresas que ya están cumpliendo con las disposiciones ambientales, pero aparte están implementando estrategias de conservación del agua, de disminución de residuos que generan, ese es otro reconocimiento que da la PROESPA, es una acreditación oficial”.

El no cumplimiento de este tipo de acciones conlleva sanciones económicas que pueden ir de las dos veces el valor de la UMA (Unidad de Medida y Actualización) hasta las 20 mil UMA´s, dependiendo de la gravedad de la falta, además de clausuras temporales.

“Las faltas más comunes y recurridas tienen que ver con el desconocimiento de la legislación, de lo que tenían qué hacer, con qué permisos deben contar, hay empresas con más de 30 años de antigüedad y que apenas están regularizando sus usos de suelo”.

Para obtener el certificado, cada empresa debe designar a un auditor interno, el cual deberá cursar un diplomado sobre cumplimiento ambiental, mismo que es impartido en línea por la Universidad Tecnológica de Aguascalientes (UT).

“En la primera convocatoria participaron 25 empresas y 31 auditores internos que lograron concluir el diplomado para acreditarse como especialistas en materia ambiental y que pudieran generar la auditoría interna en las empresas”.

Tras concluir el diplomado, los auditores internos deben hacer un informe-evaluación de la situación de su empresa en el cumplimiento de la normatividad ambiental, el cual se entregará a la PROESPA, para posteriormente realizar una visita a la empresa para verificar el cumplimiento de las acciones.

En la segunda convocatoria de la certificación ambiental, correspondiente al 2021, ya se han inscrito 15 empresas, por lo que al final del año se podría llegar a alrededor de 40 compañías acreditadas.