La violencia sexual es otra cara de los embarazos en adolescentes en Aguascalientes. No sólo existen factores relacionados a la falta de educación sexual y planificación familiar, sino que en algunos casos son producto de violaciones y abusos.
Según datos de la Fiscalía General del Estado (FGE) proporcionados a través de la solicitud de información de folio no. 063221, del 2017 al 2020 se interpusieron 198 denuncias por violación simple o violación equiparada, en donde las víctimas fueron mujeres menores de 18 años de edad.
La mayor incidencia se observa en los últimos dos años, en donde la cantidad de denuncias prácticamente se ha duplicado; por ejemplo, en el año anterior se contabilizaron 74 denuncias por ambos tipos de violación en el estado de Aguascalientes, mientras que en 2017 la cifra fue de 30.
Delito |
Año | Denuncias totales | |||
2017 | 2018 | 2019 | 2020 | ||
Violación simple | 22 | 17 | 49 | 42 | 130 |
Violación equiparada | 8 | 5 | 23 | 32 | 68 |
TOTAL | 30 | 22 | 72 | 74 | 198 |
De acuerdo al Código Penal del Estado de Aguascalientes, la violación simple está definida en el artículo 116 como “el acto en el que se realiza cópula (introducción del pene en el cuerpo humano, por vía vaginal, anal u oral) con una persona de cualquier sexo, utilizando fuerza física, moral o psicológica, para lograr el sometimiento de la víctima.
A quien cometa violación simple, la sanción contemplada son de 10 a 16 años de prisión y de 100 a 200 días multa, así como el pago total por la reparación de los daños y perjuicios ocasionados.
Sin embargo, si la víctima se trata de una niña o adolescente, de 12 a 18 años de edad, la pena corporal aumenta a un rango de 12 a 18 años de prisión, una multa de 150 a 250 días multa y al pago total por la reparación de los daños y perjuicios ocasionados.
Por su parte, la violación equiparada está definida en el artículo 120 como “realizar cópula con una persona menor de 14 años de edad sin hacer uso de la fuerza física o moral, realizar cópula con una persona que no tenga la capacidad de conocer el significado del hecho o que no pueda defenderse, así como introducir cualquier objeto distinto al pene a través de la vagina o por vía anal”.
La penalidad es la misma que en el caso de la violación simple, salvo el caso en el que se haya utilizado fuerza física o moral sobre la víctima para realizar el acto, aumentando de 15 a 25 años de prisión.
En niñas y adolescentes, 18% de denuncias por violación en Aguascalientes
Del 2017 al 2020, la Fiscalía General del Estado reportó 1,054 denuncias por violación simple y violación equiparada en Aguascalientes, según las estadísticas del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP).
Los últimos dos años han sido los que han registrado una mayor cantidad de denuncias. En 2019 se interpusieron 302 querellas, mientras que en 2020 fueron 295, lo que significa que la pandemia del Covid-19 no representó un factor determinante para modificar el comportamiento en el delito de violación, ni para aumentar ni para disminuir la cifra de denuncias.
De las 1,054 denuncias registradas en los últimos cuatro años, 198 corresponden a mujeres menores de 18 años de edad que fueron víctimas de violación simple o violación equiparada, lo que representa el 18.7%, es decir, prácticamente una quinta parte.
Sin embargo, se debe destacar que la ‘cifra negra’ de la incidencia delictiva es del 93%, por lo que sólo se denuncian ante las fiscalías y procuradurías de justicia aproximadamente uno de cada 10 delitos, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Violencia sexual, otra cara de los embarazos en adolescentes
Según datos del Instituto de Servicios de Salud del Estado (ISSEA), en los últimos cuatro años se registraron 4 mil 973 nacimientos en mujeres adolescentes en el Hospital de la Mujer, principal centro de atención gineco-obstétrica para este sector de la población en Aguascalientes.
De esa cifra, 877 se presentaron en mujeres menores de 15 años de edad, lo que representa el 17% del total de las mujeres embarazadas.
De acuerdo a la coordinadora de programas del Centro de Capacitación para el Desarrollo Comunitario (CECADEC), Verona Valencia García, las niñas y adolescentes menores de 14 años de edad son las que se encuentran en mayor riesgo y vulnerabilidad de padecer un embarazo producto de la violencia sexual, ante la falta de educación sexual y de la comprensión de las relaciones afectivas con su entorno.
“En los estudios que hemos realizado nos hemos dado cuenta que las chicas menores de 14 años que quedaban embarazadas normalmente eran por violencia sexual o por temas de abuso, una chica de esa edad es muy difícil que puedan consentir una relación sexual, no imposible, porque habrá algunas que sean precoces o lo que tú quieras, pero es muy difícil que lo puedan asumir como tal y la responsabilidad de lo que implica”.
Según datos de las autoridades encargadas de la procuración de justicia, en más del 80% de los casos de violación y abuso sexual, el agresor forma parte del entorno social más próximo de la víctima, es decir, pueden ser los padres, tíos, hermanos, primos, abuelos, padrastros, entre otras personas, lo que mantiene en velo problemas como el incesto, añadió la especialista.
“Muchas veces ni siquiera se sabe quién es el papá de ese bebé, y a veces resulta que es parte de la misma familia, entonces sí es como sacar a la luz el tema de incesto que es algo que a ninguna de las familias nos gusta, pero es una realidad”, refirió.
Además de ello, los embarazos en adolescentes en Aguascalientes se suelen presentar en mujeres con mayor condición de pobreza y marginación, lo que significa un problema de salud y de desarrollo social.
“El cinturón de pobreza en el que viven muchas mujeres que quedan embarazadas a temprana edad, lo que hace es incrementar el cinturón de pobreza con los hijos que no van a poder alcanzar a estudiar una carrera, porque se ve la realidad de la madre en el futuro de los hijos, si los padres no apoyan a la mujer, se desentienden de una manera increíble, ¿Quién más va a apoyar a esos hijos?, un salario mínimo no te alcanza para sacar la preparatoria, aunque sólo sea un hijo, no alcanza de verdad”.
Ante un embarazo derivado de una violación, las mujeres en México –incluidas las menores de edad- disponen de la Norma Oficial Mexicana 046, que permite la interrupción del embarazo, sin la necesidad de acreditar la agresión sexual ante una autoridad judicial. En el caso de las mujeres mayores de 12 años, bastará con presentar la solicitud ante la instancia de salud, mientras que para las menores de esa edad, la solicitud deberá ser firmada por sus padres o tutores.
Según datos del ISSEA, en los últimos cuatro años no se han practicado abortos a niñas o adolescentes de la entidad, en apego a la NOM-046, y únicamente en el año 2020 se realizaron dos abortos a un par de mujeres de 24 y 28 años de edad.
Sin embargo, de acuerdo a Verona Valencia, aún sigue siendo baja la cantidad de mujeres que solicitan un aborto en apego a la NOM-046, ya que las propias autoridades de gobierno limitan su difusión, lo que trunca el respeto a los derechos reproductivos de las niñas y adolescentes.
“Las instancias de salud se apegan muy poco a ella, no respetan la NOM-046 porque ha habido casos de mujeres que se han querido atender aquí a partir de la norma oficial, y no sólo no quieren, esperan la orden judicial, a pesar de que dice la norma que no es necesario, entonces acabamos llevándolas a la Ciudad de México, que es donde sí se puede”, concluyó la especialista.