Una cantidad importante de cubrebocas de tipo N95 procedentes de China no cumplen con los estándares de calidad estadounidenses, según el Instituto Nacional para la Seguridad y Salud Ocupacional (NIOSH por sus siglas en inglés) de Estados Unidos.
De acuerdo con información publicada en el diario The Wall Street Journal, se evaluaron 67 tipos de los cubrebocas y se descubrió que el 60% de las mascarillas no protegen lo suficiente al no poder bloquear el 95% de las partículas; lo que pone potencialmente a los trabajadores de primera línea en mayor riesgo de contagio.
Precisamente estos cubrebocas se llaman N95 porque bloquean el 95% de las partículas de aire, que pueden ser bacterias y partículas virales.
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El Instituto Nacional para la Seguridad y Salud Ocupacional descubrió que una las máscaras KN95 analizadas, filtraba solo el 35% de las partículas mientras que otra solo el 50%.
También se descubrió que dichos cubrebocas no tenían las cintas ajustadas aprobadas por el NIOSH, que se ajustan alrededor de la nariz y la boca creando un sello para impedir que las gotas con virus lo penetren.
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Según The Wall Street Journal, las autoridades confiscaron cientos de miles de mascarillas importadas que serían destinadas a hospitales infantiles, unidades de cuidados intensivos y hogares de cuidado. Incluso los cubrebocas decomisados decían en los empaques que habían sido aprobados por el NIOSH.
Los cubrebocas ingresaron a Estados Unidos debido a una autorización de emergencia que emitió la FDA para tratar de combatir la escasez de este producto en el país. Con esto, se permitió la importación apresurada de mascarillas certificadas en países como China, Japón y Brasil.
Con información de The Wall Street Journal y Business Insider.
