La ONG Human Rights Watch (HRW) pidió este domingo a las autoridades de Marruecos que liberen inmediatamente al periodista Omar Radi.
Radi se encuentra a la espera de juicio a principios del año próximo por publicar un tuit contra un juez del país en el que reprochó al magistrado las fuertes penas impuestas a los manifestantes de la región del Rif.
Radi, de 33 años, se enfrenta a un año de cárcel en el peor de los casos cuando termine su juicio, que comenzará el próximo mes de enero.
J'ai reçu une convocation, orale puis écrite, de la part de la Brigade nationale de la police judiciaire(BNPJ). Je m'y présenterai demain. J'ignore les raisons de cette nouvelle convocation. Il y a 9 mois, j'avais été convoqué au même service de police pour une histoire de tweet. pic.twitter.com/Fe6l31VNiC
— Omar Radi (@OmarRADI) December 25, 2019
Hay que tener en cuenta además que hace dos días vio denegada su petición para salir de la cárcel por motivos humanitarios –padece asma–.
El 6 de abril, Radi tuiteó “Recordemos a todos al juez de apelaciones Lahcen Tolfi, el ejecutor de nuestros hermanos. Secuaces como él terminan arrastrándose, alegando que solo cumplían órdenes. Ni olvido ni perdón”.
Tolfi confirmó en su día los veredictos del tribunal de primera instancia contra los líderes de protestas, en gran parte pacíficas, en la región del Rif, que fueron condenados en junio de 2018 hasta 20 años de prisión, en gran parte por confesiones que, según activistas, fueron obtenidas por la fuerza.
Sit in Rabat in solidarity with @OmarRADI, an independent journalist and activist, who was arrested over a tweet he shared 9 months ago criticising the judiciary’s fairness. No one should ever be arrested for freely expressing their opinions pic.twitter.com/DDhxrQeSPP
— Ahmed El Jechtimi ( ⵃⵎⴰⴷ ⴰⴳⵛⵜⵉⵎ) (@AhmedEljechtimi) December 28, 2019
“Criticar a los responsables de un gobierno forma parte de las protecciones del discurso y nadie debería acabar en la cárcel por expresarse en paz”, ha declarado la directora para Oriente Próximo y Norte de África de HRW, Sarah Leah Whitson.
“Las autoridades marroquíes”, ha añadido, “deberían liberar a Radi inmediatamente, y sin cargos, para poner fin a una situación que apesta a venganza política contra un periodismo crítico y activista”.
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Esta declaración tiene lugar después de que un tribunal de Marruecos condenara este jueves a cuatro años de cárcel a un hombre por “injurias” contra el rey Mohamed VI y las instituciones del país a través de su canal en YouTube.
El acusado, Mohamed Sekaki, conocido como ‘Mul Kaskita’ –el nombre de su canal–, fue detenido tras publicar un vídeo en el que criticó los discursos del monarca y tildó a los marroquíes de “burros” y “estúpidos” por apoyarle.
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