Por primera vez, los científicos han establecido un vínculo entre la radiación cósmica y los terremotos. El proyecto CREDO, iniciado en 2016 por el Instituto de Física Nuclear de la Academia de Ciencias de Polonia (IFJ PAN, por sus siglas en polaco), en Cracovia, trabaja para analizar cómo se pueden predecir los terremotos midiendo la radiación cósmica.
La destrucción que causan los fuertes terremotos podría reducirse significativamente si los científicos aprendieran a predecir dónde y cuándo ocurrirán. Un nuevo estudio del proyecto encontró una fuerte conexión entre la radiación cósmica y los terremotos, aunque no de la manera que nadie se esperaba.
“No podemos imaginar un escenario convencional en el que la radiación cósmica provoque terremotos, y esto proviene de toda mi carrera —25 años— de experiencia en el campo de los rayos cósmicos de ultraalta energía”, dijo a Newsweek el Dr. Piotr Homola, coordinador de CREDO y primer autor del artículo que describe el descubrimiento, publicado en la revista especializada Journal of Atmospheric and Solar-Terrestrial Physics.
“El resultado más intrigante de nuestro estudio es que vemos una conexión entre dos reinos científicos aparentemente desconectados: los rayos cósmicos y la sismicidad”, indica Homola.
FUNDAMENTOS MUY RACIONALES
“Pero, convencionalmente, no podemos señalar una posible relación causal: ni que los rayos cósmicos causan los terremotos, ni que algún proceso dentro de la Tierra cause un efecto regular y complejo con la radiación que precede a un choque sísmico”.
Si bien la hipótesis de que existe un vínculo entre los terremotos y la radiación cósmica puede parecer peculiar al principio, Homola explica que los fundamentos de la idea son en realidad bastante racionales.
Las corrientes de Foucault dentro del núcleo del planeta —las cuales generan su campo magnético— desvían partículas cargadas de radiación cósmica. Entonces, si un gran terremoto estuviera asociado con estas perturbaciones de flujo, el campo magnético se vería afectado y causaría cambios dentro de nuestro planeta.
Cuando los científicos de CREDO analizaron los datos de radiación cósmica del proyecto Neutron Monitor Database (recopilados durante los últimos 50 años) y el Observatorio Pierre Auger (recopilados desde 2005) encontraron una clara correlación entre los terremotos de magnitud cuatro o mayores y la intensidad de la radiación cósmica secundaria.
Pero esta correlación solo es evidente cuando los datos de rayos cósmicos se desplazan 15 días en relación con los datos sísmicos. Esto significa que podría dar a los científicos información sobre los terremotos con mucha anticipación.
LA RADIACIÓN CÓSMICA Y EL PLANETA
Pero aún no está claro si será posible determinar la ubicación de estos terremotos. Esto se debe a que las correlaciones no son evidentes en los análisis específicos de ubicación, de acuerdo con el estudio. De hecho, las correlaciones solo aparecen cuando se tienen en cuenta los datos sísmicos a escala global.
Esto sugiere que, a partir de los cambios en la intensidad de los rayos cósmicos, podemos ver “un fenómeno al que está sujeto nuestro planeta en su conjunto”.
Los hallazgos abren la puerta a considerar otras explicaciones menos convencionales. “Por otro lado, tenemos en mente escenarios exóticos como corrientes de materia oscura, capaces de afectar a la Tierra en su conjunto, de forma mecánica (choques sísmicos), y generar radiación que podría preceder al choque y que pueda ser observada con técnicas de detección de rayos cósmicos estándar”, dice Homola.
“Tal escenario de ‘terceros’ explicaría completamente la cantidad de peculiaridades en nuestra observación, aunque por el momento solo cualitativamente”, agrega. “Los estudios en curso tienen como objetivo probar los escenarios exóticos que tenemos en mente y, si tenemos éxito, por supuesto, significaría un descubrimiento histórico”. N
(Publicado en cooperación con Newsweek. Published in cooperation with Newsweek)