El Museo Getty de Los Ángeles no debería haber adquirido el “Atleta Victorioso”, una estatua de bronce que data del siglo IV a. C. y que fue descubierta frente a las costas de Italia en 1964, dictaminó este jueves 2 de mayo el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH), pero ¿a qué se debe esta postura?
Italia lleva décadas intentando recuperar esa obra de arte, entre incautaciones de la Interpol y gestiones diplomáticas, pero el museo estadounidense, que se hizo con la estatua en 1977, siempre se ha negado a devolverla.
La Fundación Getty acudió al TEDH para anular una decisión de “confiscación” adoptada por los tribunales italianos, pero los jueces fallaron el jueves a favor de Roma. “Hemos trabajado muy duro” para que se devuelva la estatua, reaccionó el ministro italiano de Cultura, Gennaro Sangiuliano, recordando que prohibió todo préstamo de obras a museos en litigio con su país.
Por su parte, el Museo Getty señaló en un comunicado que tiene previsto recurrir la decisión ante la Gran Sala del Tribunal Europeo. La estatua, que se encontró en 1964 un pescador de Fano, en el centro-este de Italia, se vendió a compradores privados sin que el Estado italiano pudiera ejercer su derecho de prelación.
Esta obra, que se atribuyó al escultor griego Lisipo y que representa a un atleta desnudo, circuló en el mercado de arte en 1974. Y adquirió entonces el Museo Getty por 3.9 millones de dólares.
“Un joven desnudo se encuentra de pie, con su peso sobre su pierna derecha, coronándose con una diadema, probablemente de olivo. La corona de olivo era el premio para el vencedor de los Juegos Olímpicos e identifica a este joven como un atleta victorioso”, descripción que ofrece el Museo Getty en su página.
“SE DESCONOCE EL ORIGEN DEL ATLETA VICTORIOSO”
De acuerdo con el recinto, los ojos de la figura originalmente estaban incrustados con piedra coloreada o pasta de vidrio, y los pezones estaban incrustados con cobre, creando contrastes de color naturalistas.
De acuerdo con medios internacionales, la estatua pudo formar parte de las esculturas de atletas victoriosos en santuarios griegos panhelénicos como Delfos y Olimpia. Sus dimensiones son: 1.51 metros de altura, 70 centímetros de ancho y 28 centímetros de profundidad, además tiene un peso de 64.41 kilos. Se desconoce el origen de la estatua, según refiere Getty, pero es posible que se trate de Olimpia, lugar histórico en Grecia, o de la ciudad natal del joven.
“Los romanos probablemente se llevaron la estatua de su ubicación original durante el siglo I a. C. o d. C., cuando el coleccionismo romano de arte griego estaba en su apogeo. Es posible que el barco que la transportaba se haya hundido, preservando la estatua durante siglos en el mar”, agrega.
La Fundación Getty acudió al TEDH en 2019 para impugnar la decisión de confiscación adoptada en 2010 por los tribunales italianos, argumentando, entre otras cosas, que la estatua griega no formaba parte del patrimonio de Italia.
“El descubrimiento accidental de esta estatua por ciudadanos italianos no la convierte en una obra italiana”, declaró en 2018 un responsable de la fundación.
DISPUTA ENTRE ROMA Y ESTADOS UNIDOS
Sin embargo, el alto tribunal europeo rechazó en su sentencia la petición del museo estadounidense al considerar que “las autoridades italianas han demostrado de manera razonable que la estatua forma parte del patrimonio cultural de Italia”.
La disputa entre Roma y Getty por el Atleta Victorioso viene de lejos. En agosto de 2007, el museo e Italia anunciaron un acuerdo para la devolución de 42 antigüedades que, según las autoridades italianas, habían sido robadas y luego exportadas ilegalmente.
El Museo Getty, fundado por el multimillonario del petróleo John Paul Getty, está respaldado por la fundación de arte más rica del mundo, con activos valorados en varios miles de millones de dólares. N