La nave espacial Solar Orbiter de la NASA y la Agencia Espacial Europea (ESA en inglés) envió a la Tierra un par de imágenes del sol con la mayor resolución jamás lograda.
La ESA compartió cuatro imágenes de la superficie del Sol, que revelan la estructura detallada de la fotosfera, el campo magnético y la corona. Estas fotografías fueron tomadas el 22 de marzo de 2023, cuando el Solar Orbiter estaba a 72 millones de kilómetros de nuestra estrella.
“El campo magnético del sol es fundamental para comprender la naturaleza dinámica de nuestra estrella, desde las escalas más pequeñas hasta las más grandes. Estos nuevos mapas de alta resolución del instrumento PHI de Solar Orbiter muestran la belleza del campo magnético de la superficie del sol y de sus flujos con gran detalle”, afirmó Daniel Müller, científico del proyecto de Solar Orbiter, en un comunicado de la ESA.
Y agregó: “Al mismo tiempo, son cruciales para inferir el campo magnético de la corona caliente del sol, que nuestro instrumento EUI (Extreme Ultraviolet Imager) está captando”.
Solar Orbiter es una sonda espacial desarrollada en colaboración por la ESA y la NASA para estudiar el sol con un nivel de detalle sin precedentes.
Lanzada el 10 de febrero de 2020, la sonda sigue una órbita elíptica, lo que le permite acercarse hasta 42 millones de kilómetros al sol, dentro de la órbita de Mercurio. Con el tiempo, su órbita se inclinará, lo que permitirá obtener vistas únicas de los polos solares, una novedad en la ciencia solar.
¿QUÉ INSTRUMENTOS PERMITIERON LAS IMÁGENES DEL SOL?
Las imágenes se obtuvieron con los instrumentos Polarimetric and Helioseismic Imager (PHI) y Extreme Ultraviolet Imager (EUI) de la sonda, que permiten a los científicos examinar muchas de las características volátiles del Sol. Las imágenes PHI revelan el sol en luz visible, un mapa magnético del sol y movimientos del plasma alrededor de la superficie del Sol (llamado tacograma), mientras que la imagen EUI muestra el sol en luz ultravioleta.
La imagen en luz visible revela la superficie del sol, conocida como fotosfera, que es la parte que podemos ver desde la Tierra. A pesar de que se le llama “superficie”, el sol no tiene tierra firme: es una enorme bola de plasma (gas ionizado) caliente y brillante.
MANCHAS SOLARES
La superficie del sol puede alcanzar temperaturas de entre 4,426 y 6,093 °C y tiene una textura granular debido al proceso de convección que forma gránulos en su superficie. Estos gránulos son pequeños patrones dinámicos de áreas brillantes y oscuras causados por la convección que juegan un papel crucial en el transporte de energía desde el interior del sol hasta su superficie.
La imagen en luz visible también revela que la superficie del sol está salpicada de manchas solares, que son zonas oscuras en la fotosfera causadas por una intensa actividad magnética. Las manchas solares son más frías que sus alrededores, con temperaturas de alrededor de 3,871 °C.
El mapa magnético del sol revela cómo estas manchas solares se encuentran en el lugar donde se concentra el campo magnético del sol. Esta intensa actividad magnética inhibe el flujo normal de energía desde el interior del sol hacia su superficie, lo que hace que las manchas solares sean más frías que el resto del sol. Las áreas grises indican regiones donde no hay campo magnético, mientras que las regiones amarillas o verdes tienen un campo magnético pequeño.
EN LUZ ULTRAVIOLETA
El tacograma tomado por el PHI muestra cómo fluye la superficie del sol, con áreas azules que representan el plasma que se mueve hacia la sonda y áreas rojas donde el plasma se aleja.
“Este mapa muestra que, si bien el plasma en la superficie del sol generalmente gira con la rotación general del sol alrededor de su eje, es empujado hacia afuera alrededor de las manchas solares”, dijo la ESA en un comunicado.
La imagen EUI muestra el sol en luz ultravioleta, que resalta cómo el plasma fluye hacia el espacio en las áreas que rodean las manchas solares. Cada una de estas innovadoras imágenes se compone de 25 imágenes individuales unidas entre sí, debido a la proximidad del Solar Orbiter a nuestra estrella.
Si bien el Solar Orbiter se acercó mucho al sol para tomar estas imágenes, 67 millones de kilómetros no es lo más cerca que un objeto creado por el hombre ha estado de nuestra estrella. N
(Publicado en cooperación con Newsweek. Published in cooperation with Newsweek)