El Festival de Cannes, celebrado del 14 al 25 de mayo, vivió un momento de nostalgia en sus primeros días, que es una constante en esta 77 edición, por sus estrenos y porque que al director Francis Ford Coppola —que presentó Megalópolis— lo acompañan, en competencia o no, varios maestros de su generación.
Paul Schrader, autor de American Gigolo, presenta el viernes a sus 77 años Oh, Canadá, que protagoniza también Richard Gere, un actor conocido por cintas como Mujer bonita (1990), Siempre a tu lado (2009) y Chicago (2002).
George Lucas, que acaba de cumplir 80 años, será objeto de un homenaje especial y recibirá una Palma de Oro honorífica, como ya sucedió con Meryl Streep, de 74, en el inicio del certamen. Otro maestro, George Miller, el padre de Mad Max, presentó el miércoles, fuera de concurso, Furiosa, otro capítulo de este éxito de ciencia ficción.
SUPERVIVIENTE DEL ATAQUE DE HAMÁS RINDE HOMENAJE A LOS REHENES ISRAELÍES
Durante la alfombra roja de Cannes, Laura Blajman-Kadar, una superviviente del ataque de Hamás el 7 de octubre, lució un vestido con un homenaje a los rehenes israelíes aún retenidos en Gaza, constató AFP.
Blajman-Kadar avanzó en la alfombra roja de la muestra con un abrigo y luego se lo retiró en la escalinata para mostrar su vestido amarillo con retratos cosidos de rehenes israelíes y una banda negra en la que se podía leer “Bring them home” (“Devuélvanlos a casa”).
El color amarillo es el símbolo de la solidaridad con los cautivos israelíes que siguen retenidos en Gaza, pero también el de los supervivientes de las masacres y de las familias en luto.
Blajman-Kadar sobrevivió a los ataques perpetrados por Hamás en el festival de música electrónica Tribe of Nova, en el sur de Israel, al límite de la Franja de Gaza. Esta francoisraelí ha escrito un libro de ello, Croire en la vie (Creer en la vida), publicado en marzo.
El conflicto estalló tras el ataque sin precedentes de Hamás en el sur de Israel el 7 de octubre, en el que murieron unas 1,170 personas, en su mayoría civiles. Más de 250 personas fueron secuestradas en el ataque, y 128 siguen cautivas en Gaza, de las que 36 habrían fallecido, según el ejército israelí.
¿ESTRENOS FEMINISTAS EN EL FESTIVAL DE CANNES?
Por otra parte, la actriz Judith Godrèche, voz del movimiento #MeToo en Francia, fue una de las protagonistas de la primera jornada de competición en Cannes. Moi aussi (Yo también), el esperado cortometraje de Godrèche, que denunció por violación a dos cineastas que supuestamente abusaron de ella en su adolescencia, recoge el testimonio de un millar de víctimas de abusos sexuales.
El cortometraje, proyectado fuera de competición el miércoles, es una forma de poner rostro a las víctimas, según Godrèche. El cine francés está inmerso en una oleada de denuncias contra abusos, en la estela del movimiento #MeToo que sacudió la industria en todo el mundo en 2017 tras el caso del poderoso productor Harvey Weinstein.
“El cine tiene una función simbólica, casi divina. Ser la actriz principal de un filme que va a Cannes te da un estatus. Decir que las personas anónimas que están en la película serán los actores principales de una película en Cannes: es ese estatus el que me interesa”, dijo la intérprete de 52 años.
‘SIMÓN DE LA MONTAÑA’, UNA CINTA SOBRE LA DIFERENCIA HUMANA PRESENTE EN CANNES
En tanto, Simón de la montaña es el primer largometraje del director argentino Federico Luis, uno de los estrenos en el Festival de Cannes que obliga al espectador a mirar de frente la diferencia humana, en este caso a un grupo de personas con discapacidad mental.
La película concursa en la Semana de la Crítica de Cannes. Lorenzo “Toto” Ferro (25 años) encarna a Simón, un chico que traba amistad con esta banda de adolescentes sorprendentes, en una localidad de los Andes.
De aventura en aventura, la cámara va revelando paulatinamente una realidad más compleja de lo que parece, empezando por el propio Simón, una figura intrigante que se mueve perfectamente entre dos mundos.
“Siento que Simón es un poco ese personaje que parece ser un extraño dentro de un mundo en el que todos son distintos a él, pero que esa diferencia no los pone a ellos en un lugar de mayor vulnerabilidad, sino en un lugar de poder”, explicó este jueves 16 de mayo Federico Luis (34 años) en Cannes.
Este cineasta empezó a sonar en el cine argentino con La siesta, un cortometraje presentado en 2019 en Cannes y que luego fue premiado en Toronto y Buenos Aires. En ese entonces, era conocido por su nombre completo, Federico Luis Tachella. Con Simón de la montaña decidió dejar de lado su apellido paterno, pero no hay ninguna animosidad en esa decisión, asegura.
“Yo amo a mi familia y ellos me aman a mí. Pero simplemente sentí que era dar un paso de independencia. Emanciparme de eso me hacía sentir más libre”, explica. N