LIVE

Los jóvenes y la verdad: una nueva revolución para México.

Publicado el 27 de octubre, 2025
Los jóvenes y la verdad: una nueva revolución para México.

I. LOS JÓVENES COMO ESPERANZA RADICAL

“En tiempos de engaño universal, decir la verdad se convierte en un acto revolucionario”. — George Orwell

Cada vez que leo esa frase de Orwell, pienso en los jóvenes.

En ellos veo la última gran esperanza de nuestro tiempo. Ellos, que ya no aceptan discursos huecos ni héroes de cartón, son los únicos dispuestos al acto verdaderamente revolucionario: buscar la verdad.

Vivimos en una época saturada de imágenes, emociones y versiones manipuladas. Oxford Dictionaries definió post-truth como una era en la que “los hechos objetivos pesan menos que las creencias personales”.

Y Hannah Arendt lo advirtió hace medio siglo: “La mentira organizada puede sustituir la realidad misma”.

Hace veinticinco años llegué a la Presidencia de México con la convicción de que la verdad debía regresar al centro de la vida pública. Hoy sigo creyendo lo mismo, aunque las trincheras hayan cambiado.

Quizás la razón por la que los mexicanos me dieron su confianza en el año 2000 fue precisamente esa: creyeron que después de 71 años de un solo partido sí era posible el cambio, que la democracia no era una ilusión. Esa fe en la verdad y en la posibilidad de transformar al país fue —y sigue siendo— mi mayor inspiración.

He aprendido que los jóvenes —críticos, desconfiados, pero también valientes— no piden perfección: piden honestidad. Por eso busco en esta etapa de mi vida hablar directamente con ellos: a través del Programa de Liderazgo de Verdad, un espacio de diálogo con y para ellos; del podcast Líderes de Verdad, que se transmite en YouTube; y de una voz dirigida —inclusive en esta columna— a quienes sabrán cambiar a México de verdad.

Porque decir la verdad, en estos tiempos, sigue siendo el acto más revolucionario.

II. EL RETO DE LA POSVERDAD: CLIMA, MIGRACIÓN Y POPULISMO

Vivimos rodeados de versiones encontradas y discursos extremos. Un día se dice que el cambio climático es un engaño; al siguiente, que el fin del mundo está cerca. ¿Dónde queda la ciencia? En la migración, se repiten mitos como que los migrantes “invaden” o “roban empleo”, cuando en realidad son un factor de dinamismo y crecimiento en las economías modernas.

Y en la política, los populismos —ya sean de derecha o de izquierda— prometen soluciones simples para problemas complejos, construyendo aplausos sobre la emoción y no sobre la evidencia.

Karl Popper advirtió que “la democracia solo sobrevive mientras podamos distinguir entre verdad y falsedad”. Hoy esa frontera parece desdibujarse.

Cuando la emoción pesa más que el razonamiento y la viralidad más que la verdad, las democracias se convierten en escenarios de manipulación donde defender los hechos es un acto de valentía.

III. JÓVENES Y AUTENTICIDAD: RECONSTRUIR CONFIANZA

Pero no todos se dejan engañar. Los jóvenes —desencantados de partidos, instituciones y discursos— buscan coherencia y sentido. Algunos incluso cuestionan el valor de la universidad, no por pereza, sino por ver demasiados ejemplos donde la verdad se negocia.

Yuval Noah Harari advierte que las sociedades que dejan de creer en su conocimiento se vuelven vulnerables a la manipulación. Por eso hablar con la verdad no es un ideal romántico: es el primer paso para reconstruir la confianza.

Las encuestas confirman que los jóvenes son el grupo que más cuestiona las narrativas políticas populistas. En Estados Unidos, solo el 15 % de los menores de 30 años cree que el país va por buen rumbo bajo Donald Trump, según el Harvard Youth Poll (2025), citado por The Washington Post (23 abril 2025).

En México ocurre algo similar. Estudios recientes confirman que los jóvenes urbanos son quienes más cuestionan al partido Morena y a la presidencia de Sheinbaum, sobre todo en temas de medio ambiente, transparencia y libertad de expresión (El País, 5 octubre 2025).

Es una generación que ya no se deja guiar por consignas: exige coherencia, verdad y resultados.

IV. LA VERDAD DIGITAL Y LA INTELIGENCIA ARTIFICIAL

La nueva frontera de la verdad también pasa por la tecnología.

La inteligencia artificial —esa herramienta que algunos temen y otros celebran— puede ser usada tanto para confundir como para esclarecer. Depende, como todo poder, de quién la guíe y con qué propósito.

Hoy más de 200 millones de personas utilizan herramientas de IA generativa para estudiar, escribir o resolver problemas cotidianos (Statista, 2025). Nunca antes la humanidad había tenido acceso tan inmediato al conocimiento… ni había estado tan expuesta a la desinformación.

El filósofo y tecnólogo Yuval Noah Harari advierte que la IA “no solo crea palabras: crea ideologías”. Si no aprendemos a distinguir entre la información producida por el ser humano y la generada por algoritmos, podríamos perder la noción misma de lo que es real.

Sin embargo, bien orientada, la IA puede ser una gran aliada de la verdad. A diferencia de muchos discursos humanos, busca coherencia, evidencia y patrones verificables. No tiene emociones ni intereses partidistas: su impulso —al menos por ahora— es organizar lo real. Y quién sabe… si algún día ChatGPT calificara un discurso de Trump, quizá respondería con una sonrisa digital: “Interesante… pero lleno de fake news”.

La tecnología, como la política, necesita líderes con brújula moral. Utilizada con ética, la inteligencia artificial podría ayudarnos a filtrar el ruido y recuperar el valor de la verdad.

V. LÍDEREZ DE VERDAD: EL PROYECTO VIVO

Desde esta convicción nació el podcast Líderes de Verdad. Durante las primeras semanas he conversado con Moris Dieck, Arturo Elías Ayub y Robe Grill: distintos en experiencia, unidos en integridad —personas que inyectan verdad en la vida pública.

Este proyecto no busca imponer ideas, sino escuchar y proponer. Porque los jóvenes —y todos nosotros— merecemos espacios donde la palabra vuelva a tener peso.

VI. LA VERDAD OS HARÁ LIBRES

No soy un líder perfecto, ni lo pretendo ser. Pero aprendí que la verdad, aunque duela, construye; la mentira, aunque aplauda, destruye.

En el pórtico de la Universidad de Guanajuato —mi tierra querida— está inscrita una frase eterna: “La verdad os hará libres”. Hoy, en medio del ruido, recordar eso no es nostalgia: es una invitación a actuar. A creer que la verdad —dicha, defendida y vivida— sigue siendo el camino de los verdaderos líderes.

La verdad es que sí podemos cambiar a México. Sí podemos tener una nación sin corrupción. Sí podemos, junto con los jóvenes, construir una nación más justa y con oportunidades para todos.

Sí podemos forjar un país donde la verdad y la esperanza vuelvan a guiar nuestro destino.

Porque cuando los mexicanos creemos en nosotros mismos, la historia se mueve.

¡Esa es la verdad! N

NEWSWEEK EN ESPAÑOL AMÉRICA RECOMIENDA LAS SIGUIENTES NOTICIAS

Compartir en:
Síguenos
© 2025 Newsweek en Español