Un misterioso collar del siglo XVIII con casi 500 diamantes de 300 quilates, posiblemente relacionado con un escándalo que contribuyó a la caída de María Antonieta, se vendió este miércoles 13 de noviembre por 4.8 millones de dólares.
Se estimaba que la joya, que sobrevivió intacta de “milagro” varios siglos, según Andrés Blanco Correal, jefe del departamento de joyería de Sotheby’s Europa, alcanzaría un precio de entre 1.8 y 2.8 millones de dólares. Al final superó la meta.
Tras una subasta animada en Ginebra, el collar alcanzó los 3.55 millones de francos suizos (4 millones de dólares), con lo que el total después de impuestos y comisiones fue de 4.26 millones de francos suizos (4.81 millones de dólares).
Además de ser una pieza excepcional, se cree que algunos de sus diamantes proceden de la joya que protagonizó el “asunto del collar”, un complot para robar una lujosa pieza en el que se vio implicada María Antonieta.
Este escándalo ocurrido en la década de 1780 contribuyó a empañar la reputación de la última reina de Francia, aunque fuera inocente, e impulsó el apoyo a la Revolución Francesa que se avecinaba.
“Esta espectacular joya antigua es una increíble superviviente de la historia”, declaró Sotheby’s en un comunicado previo a la venta.
LA HISTORIA DETRÁS DEL COLLAR VINCULADO A MARÍA ANTONIETA
El collar, formado por tres hileras de diamantes, termina en dos impresionantes borlas. La elaboración resalta la transparencia de las piedras preciosas y confiere gran flexibilidad a esta pieza “rara y muy importante” de la época georgiana, según la casa de subastas.
“La joya pasó de familia en familia. Podemos empezar a principios del siglo XX, cuando formaba parte de la colección de los marqueses de Anglesey”, explicó Blanco Correal.
Se dice que los miembros de esta familia aristocrática lucieron la alegría dos veces en público: una en la coronación del rey Jorge VI en 1937 y otra en la de su hija, la reina Isabel II, en 1953.
Más allá de eso, poco se sabe del collar, del joyero que lo diseñó y del cliente original. Sin embargo, la opulencia de la pieza estaba inevitablemente reservada a familias reales, de la alta nobleza o más adineradas.
“Es una obra maestra de la época georgiana y una lección magistral de diseño, artesanía e innovación técnica para su época”, escribió Blanco Correal.
En palabras del jefe del departamento de joyería de Sotheby’s Europa, hoy en día sigue siendo tan relevante, seductora y atractiva como cuando se creó hace más de 200 años. N
(Con información de AFP)