“Visión” es el título del primero de tres episodios que conforman la docuserie de Netflix sobre la carrera del productor y rapero estadounidense Kanye West. El estreno de este primer episodio de la serie Jeen-Yuhs llega en un momento clave en la vida de Kanye. Y es que, solo en este mes, el músico ha acaparado las portadas de los tabloides estadounidenses por varios escándalos.
Primero, por difundir los mensajes de su ex, Kim Kardashian, pidiéndole que no haga públicos sus pleitos legales por la custodia de sus hijos. Luego, por invitar al recién acusado de abuso sexual, Marlyn Manson, a colaborar en su próximo álbum, Donda 2.
Asimismo, amenazó al festival de música Coachella con no presentarse este año a menos de que la cantante Billie Elish (también parte del cartel) se disculpe por supuestamente criticar los descuidos de Travis Scott durante su presentación en Astroworld, donde murieron diez personas. Kanye le debe una a Travis. Este fue el único miembro de la familia Kardashian que le dio la dirección de la fiesta de cuatro años de su hija Chicago.
Y hace días Kanye se robó los reflectores del Super Bowl al despotricar en su Instagram contra Elish, Pete Davidson, Kim Kardashian y Taylor Swift. Todo porque tiene el corazón roto. O porque, honrando a su estratega interior, sabe que a pocos días del estreno de este documental y de Donda 2, no hay publicidad mala.
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El documental Jeen-Yuhs fue dirigido, producido y narrado por su amigo Clarence Coodie Simmon. Después de conocer a Kanye en el año 2000, este decidió dejar su propia carrera como comediante para seguirlo a Nueva York y hacer un documental sobre su ascenso inminente a la fama.
En otro momento, el documental hubiera sido un homenaje al arduo camino del rapero y productor. Ahora parece una muestra de la gran caída a la que se ha enfrentado quien años atrás tocaba el sol. Lo único real que podemos apreciar en las casi cuatro horas que dura Jeen-Yuhs es todo lo que Kanye West, hoy conocido como Ye, ha perdido.
“Visión” es una mirada a los inicios de Kanye como rapero. Comienza cuando ya se ha consolidado como productor trabajando con artistas como Jay-Z. Desde ese momento comprendemos que lo que Kanye quiere en realidad es rapear, hacer su propia música y subirse a grandes escenarios.
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Podemos ver que desde sus inicios ha sido un hombre determinado a conseguir lo que se propone y a quien la humildad no le viene fácil. Hay unas escenas conmovedoras en las que lo vemos con su madre, quien con toda honestidad le dice a su hijo que algunas veces, cuando lo entrevistan, se muestra sumamente arrogante. Algo más que nos aporta este primer capítulo: la arrogancia de Kanye no le llegó con la fama.
Durante las próximas semanas podremos ver los siguientes dos episodios en Netflix. Aún quedan muchos temas por tocar. Por ejemplo, las supuestas alegaciones sobre la salud mental de Kanye, su relación con las Kardashians, su campaña pro-Donald Trump. Y también sus famosos Sunday Services y su alienación de quienes en algún momento fueron su séquito. N