La discusión por el financiamiento del muro fronterizo en Estados Unidos –que causó al cierre parcial en el gobierno– se tornó personal entre el presidente Donald Trump y la líder de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi.
El miércoles, Pelosi urgió a Trump a posponer su discurso sobre el Estado de la Unión el 29 de enero, para presentar su programa anual, debido al cierre que paraliza al gobierno y condicionó un acuerdo.
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“Desafortunadamente, teniendo en cuenta los problemas de seguridad y, a menos que los servicios del Estado reabran esta semana, sugiero que trabajemos juntos para encontrar otra fecha (…) o que considere dar su discurso sobre el Estado de la Unión por escrito al Congreso”, dijo Pelosi.
Un día después, el presidente respondió con una misiva en la que le avisa a la legisladora sobre la cancelación el viaje de la delegación estadounidense al Foro de Davos, al que llamó un evento de relaciones públicas.
El texto firmado por Trump le dice a Pelosi que “debido al cierre, lamento informarle que su viaje a Bruselas, Egipto y Afganistán ha sido pospuesto […]. A la luz de los 800,000 grandes trabajadores estadounidenses que no reciben pago, estoy seguro que aceptará que el posponer este evento de relaciones públicas es totalmente apropiado”.
“Espero verla pronto y estoy ansioso por ver nuestra abierta y peligrosa frontera sur finalmente recibir la atención, los fondos y la seguridad que merece tan desesperadamente”, dijo Trump.
El secretario del Tesoro, Steve Mnuchin, debía encabezar la delegación de cinco miembros que también incluía al secretario de Estado Mike Pompeo, al secretario de Comercio Wilbur Ross, al representante de comercio estadounidense Robert Lighthizer y al asistente del presidente Chris Liddell.
La decisión de anular el viaje a Davos se produce después de que Trump atacara a su principal oponente demócrata, Nancy Pelosi, con una cancelación de último momento de su plan de tomar un avión de la fuerza aérea a Afganistán, citando la parálisis gubernamental que ya lleva cuatro semanas como motivo.
Unos 800,000 empleados federales y muchos más contratistas del gobierno están afectados por este cierre, provocado por la negativa de Trump a aprobar la financiación de una serie de departamentos en represalia por la negativa de los demócratas, que controlan la cámara baja del Congreso, a aprobar sus planes para un muro fronterizo entre México y Estados Unidos.
La semana pasada, Trump canceló su propia participación en Davos, también citando la disputa sobre el muro.
Con información de AFP
