Stephen Hawking -el famoso cosmólogo británico que puso los agujeros negros en la sala de estar gracias a su popular libro, Breve historia del tiempo– murió en marzo al cabo de cinco décadas de luchar contra la esclerosis lateral amiotrófica, también conocida como la enfermedad de Lou Gehrig. Y ahora, después de mucha expectación, su último artículo científico al fin ha sido publicado en la revista Journal of High Energy Physics.
El documento aborda el extraño y maravilloso concepto del “multiverso” donde, a resultas del Big Bang, nació un “mosaico” infinito de “universos de bolsillo”. Sin embargo, el último artículo de Hawking propone una idea mucho más prolija: si bien nuestro universo no está solo, tiene mucha menos compañía de lo que se pensaba antes.
El artículo de Hawking trata sobre algo llamado “inflación eterna”. El universo cobró vida tras la explosión del Big Bang; y en los primeros momentos de su existencia, ocurrió un breve, pero increíble estallido de inflación exponencial. Muchos físicos creen que hay ciertas regiones donde esa inflación podría continuar eternamente, mientras que en las áreas donde la inflación se detiene pueden formarse estrellas y planetas, como ocurrió en nuestro universo.
El multiverso es una consecuencia peculiar de esta idea. Nuestro universo podría ser apenas una burbuja pequeña y observable entre muchas otras, separadas mediante un mar que se infla eternamente. En teoría, podría existir una cantidad infinita de universos de bolsillo; algunos parecidos al que habitamos, y otros completamente distintos.
Ese multiverso perturbaba a Hawking. No es posible hacer pruebas con una cantidad infinita de universos de bolsillo, de manera que la teoría resulta científicamente insatisfactoria. “La virtud de la física tradicional es que podemos falsificar sus teorías haciendo experimentos”, explicó Avi Loeb, profesor de ciencias Frank B. Baird Jr. en la Universidad de Harvard, entrevistado por Newsweek. “La ciencia es una experiencia de aprendizaje. Y si renunciamos a la posibilidad de falsificar nuestras ideas, entonces no aprenderemos con nuestros experimentos”.
Thomas Hertog, coautor de Hawking y profesor de KU Leuven, en Bélgica, está de acuerdo. Así que informó a la BBC: “Ni Stephen ni yo quedamos conformes con ese escenario… Sugiere que el multiverso surgió al azar, y que no podemos decir mucho más al respecto”.
Hawking y Hertog estaban decididos a encontrar una explicación más adecuada. Así que, para desarrollar su idea, recurrieron a la teoría de las cuerdas, la cual intercambia el concepto habitual de las partículas puntuales por el de unas diminutas cuerdas unidimensionales que vibran. Y a partir de las matemáticas de la teoría de cuerdas, Hawking y Hertog proponen que solo hay universos con leyes físicas como las nuestras, informa la BBC.
La investigación presenta solo uno de los muchos conceptos sobre la inflación. Loeb señala que, si bien es un artículo estimulante, no tiene mucho de revolucionario. “El artículo supone una salida fácil de la inflación eterna”, añadió. En su opinión, la conclusión final no quedó demostrada matemáticamente.
Según Hertog, la investigación sienta las bases para detectar otros universos posibles, ya que reducir la cifra respecto del infinito hace que el concepto resulte más previsible y comprobable. Por ello, una declaración de la Universidad de Cambridge informa que Hertog pretende sondear las ondas gravitacionales para probar el modelo en una escala más pequeña. Por desgracia, según dijo Hertog a la BBC, eso no significa que algún día exploraremos, realmente, esos otros universos.
Como era de esperar de un físico que catapultó la astrofísica a la corriente principal, el último trabajo de Hawking fue debatido ampliamente antes de publicarlo. Y ahora, los físicos de todo el mundo sin duda escudriñarán el alucinante documento para profundizar en los orígenes de nuestro universo.
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Publicado en cooperación con Newsweek / Published in cooperation whit Newsweek