

La transición de Consejo Nacional de Ciencia, Humanidades y Tecnología (CONACHYT) a Secretaría de Ciencia, Humanidades, Tecnología e Innovación (SECIHTI), la eliminación de los fideicomisos destinados a dichas ramas y las modificaciones presupuestales han representado un reto para la comunidad científica en México.
Gabriel Purón Cid, director del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE) Región Centro, reconoce que en los últimos años las investigaciones y la ciencia han venido a menos en México, pues los recursos públicos destinados a estas actividades resultan insuficientes.
“He visto una reducción en general de la investigación en México, de productos científicos, artículos, libros y la calidad también ha bajado mucho. Es lamentable, porque hay generaciones que vienen empujando y México necesita gente preparada” señaló.
El académico señala que ha venido a menos el presupuesto para el ejercicio de la ciencia en México, por lo que la comunidad ha tenido que reducir actividades, disminuir costos y optar por diferentes metodologías para sacar adelante investigaciones y proyectos, lo que ya repercute en las próximas generaciones.
“Aquí en Aguascalientes hay poco más de 300 SNI´s, la mayoría en la UAA; estos, normalmente, impartimos 3 o 4 cursos al año, estamos expuestos a máximo 50 jóvenes, si lo multiplicas, estamos hablando de aproximadamente 5 mil jóvenes expuestos a la ciencia, pero son 50,000 mil, ni el 10% están siendo abordados” ejemplificó.
Aunque el gasto federal en ciencia y tecnología no ha colapsado, tampoco ha crecido al ritmo necesario para sostener la capacidad científica del país. Tras estancarse entre 85 y 89 mil millones de pesos en 2015–2019 y mantenerse prácticamente plano en torno a 107 mil millones en 2021–2022, el presupuesto específico del sector apenas repuntó de 29.3 a 33.4 mil millones entre 2022 y 2023, según datos oficiales.