Hace tres años, un agricultor de la provincia china de Hebei desenterró un fósil misterioso y lo llevó al Museo Paleontológico de Liaoning. Después de estudiar el hallazgo, los científicos han anunciado que es el fósil de un nuevo dinosaurio del tamaño de un pato, y cuyo increíble plumaje brillaba como un arcoíris viviente.
Un equipo internacional de científicos que estudia al dinosaurio, llamado Caihong juji, descubrió el colorido plumaje luego de analizar con sumo cuidado los minúsculos melanosomas del fósil (las partes de las células que contienen pigmentos). Su investigación fue publicada en la revista Nature Communications.
El color de un animal está determinado por la forma de sus melanosomas, así como por el pigmento. “Los colibríes poseen plumas iridiscentes, de colores intensos, pero si tomas una pluma de colibrí y la haces pedacitos, solo verás polvo negro”, explicó Chad Eliason, investigador postdoctoral del Museo Field de Historia Natural en Chicago, en un comunicado de prensa. “El pigmento de las plumas es negro, pero las formas de los melanosomas que producen el pigmento son las que producen los colores de las plumas del colibrí”.
Para determinar si era posible encontrar residuos de las formas de los melanosomas, los investigadores analizaron 66 regiones del fósil al microscopio. Encontraron melanosomas planos y circulares, dispuestos en filas en la cabeza, el pecho y la cola de Caihong. Compararon esos melanosomas con los de aves modernas de plumas iridiscentes, cuyos melanosomas tienen la misma forma. El hallazgo indica que partes del plumaje de Caihong eran intensas y multicolor, como el cuello de un colibrí.
No se sabe, exactamente, cuándo evolucionó la iridiscencia en las aves, pero Caihong nos brinda una idea un poco más aproximada, porque este fósil de 161 millones de años es el ejemplo de iridiscencia más antiguo que se conoce en un dinosaurio emplumado.
Hoy, las aves que presentan iridiscencia, como los machos del ave del paraíso, utilizan sus colores llamativos para atraer parejas. Es una táctica que también usan los miembros no aviares del reino animal. Por ejemplo, las arañas pavorreal recurren a diminutas escamas iridiscentes durante el cortejo.
Caihong también está ayudando a los científicos a entender cómo se desarrollaron otros rasgos de las aves. El dinosaurio tenía una cresta en la cabeza, y plumas largas en alas y cola, pero no podía volar. También es el ejemplo más antiguo de un dinosaurio con plumas asimétricas, lo que significa que las barbas de un lado eran más grandes que las del otro.
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Publicado en cooperación con Newsweek / Published in cooperation with Newsweek