Los aranceles propuestos por el presidente electo Donald Trump han generado tensión entre Estados Unidos y México, especialmente tras las declaraciones de la mandataria mexicana, Claudia Sheinbaum, quien afirmó estar dispuesta a aumentar los aranceles en respuesta si no se logra un acuerdo. Analistas ya advierten sobre posibles repercusiones en los precios de automóviles y materiales de construcción en México, pero también surgen interrogantes sobre cómo estas medidas impactarán a los consumidores de EUA.
Sheinbaum adelantó este martes que estaba dispuesto a hacer un trato si Trump cumple con sus planes de aumentar los aranceles a los vecinos de Estados Unidos.
“A un arancel le seguiría otro como respuesta y así sucesivamente hasta poner en riesgo negocios comunes”, dijo.
Algunos seguidores de Trump consideran que está utilizando los aranceles como herramienta de negociación, pero la advertencia de Sheinbaum deja claro que México no tiene intención de ceder fácilmente. Esto sugiere que las relaciones entre ambos países podrían volverse más tensas bajo su liderazgo, especialmente en comparación con la dinámica que existió entre Trump y el expresidente de México Andrés Manuel López Obrador durante sus respectivos mandatos.
LOS ARANCELES PROPUESTOS POR TRUMP A MÉXICO, CANADÁ Y CHINA; ASÍ AFECTARÁN A LOS CONSUMIDORES DE EUA
Trump anunció el lunes que aumentará un arancel del 25 por ciento a todos los productos provenientes de México y Canadá si los dos países no detienen el flujo de drogas y migrantes a través de las fronteras. También anunció un arancel del 10 por ciento a los productos provenientes de China.
Había hecho promesas similares durante la campaña electoral, al prometer implementar un arancel general del 60 por ciento sobre los productos chinos y un arancel del 10 al 20 por ciento sobre las importaciones de todos los demás socios comerciales.
Según Trump, una escalada masiva en la guerra comercial no impactaría los precios al consumidor y, además, impondría costos a otros países mientras fortalece la industria manufacturera estadounidense. Sin embargo, la mayoría de los economistas, incluidos los republicanos, no están de acuerdo. Sostienen que los aranceles suelen traducirse en precios más altos para los consumidores, ya que los vendedores extranjeros tienden a aumentar el costo de sus productos para compensar las tarifas que deben pagar al Tesoro de Estados Unidos.
“Un arancel es un impuesto que paga el importador estadounidense, no un país extranjero ni el exportador. Este impuesto, en última instancia, sale de los bolsillos de los consumidores a través de precios más altos”, comentó Jonathan Gold, vicepresidente de cadena de suministro y política aduanera de la Federación Nacional de Minoristas (NRF, por sus siglas en inglés), en un comunicado de prensa a principios de este mes.
¿QUÉ BIENES PODRÍAN VERSE AFECTADOS POR LOS ARANCELES MEXICANOS?
En 2023 México se convirtió en el mayor socio comercial de Estados Unidos, eclipsando a Canadá y China. En ese mismo año, Estados Unidos y México intercambiaron casi 798,000 millones de dólares en bienes y servicios.
“El mercado estadounidense y el mercado mexicano en realidad no son mercados separados”, sostuvo por su parte Raymond Robertson, director del Instituto Mosbacher de Comercio, Economía y Políticas Públicas de la Universidad Texas A&M, Estados Unidos.
Y agregó al tema: “Hay un solo mercado laboral, un solo mercado de estudios, un solo mercado energético; no son mercados separados. Por lo tanto, estos aranceles a México son muy parecidos a imponer aranceles a California; no es bueno para nuestros consumidores”.
Siete industrias importantes, entre ellas la automotriz, la agrícola, la electrónica, los combustibles minerales, los plásticos, la maquinaria, el aluminio y acero, serán las más afectadas por los aranceles entre ambos países.
Los propietarios de pequeñas empresas han advertido que los aranceles podrían ser “devastadores” para los estadounidenses. Joe Maxwell, un agricultor de cuarta generación de Misuri, señaló a Newsweek que los aranceles perjudicarían ampliamente a las granjas estadounidenses, que tendrían que pagar más por productos como fertilizantes nitrogenados.
CONSUMIDORES DE EUA EN RIESGO
“Voy a explicar una cosa que todo el mundo en este país necesita saber: si el presidente [Trump], y estoy seguro de que lo hará, cumple su compromiso de aumentar los aranceles hasta un 20 por ciento en general, 60 por ciento en China, 200 por ciento en John Deere fabricado en México, entonces vamos a pagar más que simplemente poner esto en las tiendas de los consumidores”, dijo Maxwell.
Alice Vaughn, fundadora y directora ejecutiva de MilkToast Brands, una empresa con sede en Las Vegas, también advirtió que, si se impusieran los aranceles, “los despidos serían inevitables”.
“Actualmente todos mis productos se fabrican internacionalmente y, aunque algunos podrían sugerirme que ‘simplemente cambie a fabricantes estadounidenses’, no es tan sencillo. Incluso los fabricantes con sede en Estados Unidos obtienen materiales y equipos en todo el mundo, por lo que los aranceles también los afectarían. Y para ciertos productos, las capacidades de fabricación simplemente no existen a nivel nacional. Décadas de deslocalización han construido una economía global que no se puede revertir de la noche a la mañana”, indicó.
Para Vaughn, la presión financiera la obligaría a reducir su equipo, limitar el desarrollo de nuevos productos y bajar las operaciones. “Los clientes, que ya están sintiendo los efectos de la inflación, se verían afectados por precios más altos, lo que reduciría la demanda”, añadió.
“ES UNA POLÍTICA INFLACIONARIA”, COMENTA EL CONSEJO EMPRESARIAL DE MÉXICO
Durante la conferencia matutina de este miércoles 27 de noviembre, Claudia Sheinbaum presentó el Consejo Asesor de Desarrollo Económico Regional y Relocalización (CADERR), conformado por 15 empresarios, como un frente unido para combatir los aranceles del 25 por ciento.
“Estados Unidos nos necesita como un socio importante para poder enfrentar a China; necesitamos ser aliados. Este esquema de aranceles lo que haría es que le restaría mucha competitividad a EUA en sus exportaciones hacia el mundo”, comentó uno de los empresarios.
En tanto, Gina Díez Barroso Azcárraga, fundadora de Dalia Empower, una iniciativa global de educación continua para las mujeres, argumentó que el anuncio de Trump resulta una política inflacionaria
“Esa política del presidente Trump, que no sabemos si es política o amenaza, es una política inflacionaria al 100 por ciento en su país (…) México dejó de ser la maquila para ser fabricación de alto nivel. Tenemos la capacidad de fabricar de alto nivel, de competir con el mundo y de exportar a donde queramos exportar”, señaló en relación a los consumidores de EUA y mexicanos. N
(Publicado en cooperación con Newsweek. Published in cooperation with Newsweek)