Un grupo de investigadores usó rayos cósmicos del espacio profundo (fuera del sistema solar) para crear una poderosa sonda que investigue los misterios ocultos de la gran pirámide de Guiza.
El equipo, que incluye a Alan D. Bross, del Departamento de Física de Altas Energías (HEP) del laboratorio estadounidense Fermilab, usará este método, que se asemeja a una técnica que adoptó primero Luiz Alvarez en los años 50, para investigar los vacíos misteriosos en la pirámide.
El método de imagenología de muones de rayos cósmicos que se usó representa una herramienta muy poderosa. Esta logra ver en las profundidades de la estructura de la pirámide de Guiza. Y permite a los investigadores buscar cámaras “secretas” o espacios vacíos.
En particular, este equipo intentará descubrir si el más grande de dos vacíos, revelados en escaneos previos, podría ser un pasillo que lleva a la cámara funeraria del faraón Khufu.
La técnica que usaron los investigadores depende de rayos cósmicos poderosos del espacio profundo que bombardean a la tierra con regularidad.
LA MAGIA DE LA REACCIÓN EN CADENA
Cuando estas partículas energéticas cargadas —que han viajado desde el espacio interplanetario, interestelar o incluso intergaláctico— chocan con partículas de oxígeno o nitrógeno en la atmósfera superior, pueden provocar una reacción en cadena.
Esta reacción en cadena crea una cascada de partículas que llueven en la superficie de la tierra. Entre ellas están los muones, partículas similares a los electrones, pero con una masa aproximadamente 200 veces más grande.
A pesar de que estas partículas son efímeras, el que viajen a velocidades relativistas significa que pueden llegar al nivel del mar. Ello antes de descomponerse en electrones y neutrinos.
Los muones se ralentizan o dispersan cuando se encuentran con átomos pesados, lo que quiere decir que al colocar detectores de muones alrededor de la gran pirámide, el equipo puede construir una imagen 3D del interior de la estructura.
Andrea Giammanco, investigadora del Centro de cosmología, física de partículas y fenomenología de la Universidad Católica de Lovaina, en Bélgica, dijo a la revista científica Reviews in Physics (publicada por Elsevier): “Los muones llegan gratis, son una forma de radiación perfectamente segura, y se producen de forma natural y habitual. No se necesitan aceleradores costosos o fuentes riesgosas de radiación natural.
OBSERVAR LOS MUONES DESDE TODOS LOS ÁNGULOS
“La obtención de imágenes de muones crea vínculos con otras áreas de la ciencia como la física de partículas, la geología, y la arqueología, que de otra forma están desconectadas”, dijo Giammanco, autora de un análisis sobre métodos de escaneo que usan muones atmosféricos.
En un artículo que detalla los escaneos más recientes de la pirámide de Guiza, los autores explican los planes para un sistema de telescopios 100 veces más sensible que los del equipo recién usado en dicha pirámide.
Esto permitirá observar los muones desde casi todos los ángulos y producirá, por primera vez, una verdadera imagen topográfica de una estructura tan grande.
Además de revelar los secretos de la pirámide de Guiza en particular, considerada una de las maravillas del mundo antiguo, el sistema también podría enseñarles a los arqueólogos más sobre las técnicas de construcción que se usaron en Egipto entre 2575 y 2465 a. C. N
(Publicado en cooperación con Newsweek / Published in cooperation with Newsweek)