Tratamos de mantenernos frescos, pero estamos calentando al planeta. ¿Cómo podemos lograr un equilibrio? En este artículo, algunas recomendaciones de la experta.
Históricamente el ser humano ha buscado la manera de mitigar el clima extremo. El frío o calor incomodan a las personas y no les permite concentrarse, desarrollar su trabajo, e incrementar su productividad, siempre con los mismos resultados: fatiga, mal humor, contracción de músculos, transpiración excesiva y a veces se alcanza la deshidratación.
Incluso la Organización de las Naciones Unidas (ONU), procura que los esfuerzos por moderar el clima sean atendidos mediante metodologías como la responsabilidad social empresarial, como se observa en el punto 7 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible: “Energía asequible y no contaminante”.
En el mundo hay más programas y herramientas de gestión a favor del buen uso de la energía alternativa y eso está llevando al ser humano a ser más consciente del consumo de energía, pero todavía no lo suficiente para dar carpetazo a este indicador.
Pareciera un círculo vicioso. El cambio climático genera temperaturas más extremas, y entonces el individuo mitiga con equipos como el aire acondicionado, contribuyendo en mayor o menor grado a la generación de gases efecto invernadero (GEI) de tal forma que no parece haber fin.
¿Pero podemos mantener un espacio más confortable sin dañar a nuestro planeta? Aquí planteo algunas sugerencias:
- En calor intenso, humedece una toalla con agua y pásala por cuello y muñecas. Esto ayudará a regular tu temperatura corporal.
- Minimiza el uso de aparatos eléctricos o electrónicos durante el verano. Inclusive si utiliza ventiladores o aire acondicionado, forzarás el equipo y consumirá más energía.
- Mantenga cerradas persianas y cortinas durante el día para que los rayos del sol no entren. Por la noche, cuando refresque el exterior, abra todo para que circule el aire. De otro modo, generara humedad en exceso, que podría causar moho en las paredes, tan dañino a la salud.
- El blanco y en general los colores claros en interior y exterior, absorben la energía solar y reflejan la luz mejor durante el día. Esto ayuda a mitigar el calor interior.
- Si utiliza ventiladores de techo para consumir poca energía, pero colocarlo cerca de ventanas o pasillos de tal forma que el aire circule dentro del espacio generando una sensación de frescura.
- Si desea adquirir un aire acondicionado, revisa las opciones del mercado. Las tecnologías con alta eficiencia tienen menor impacto en tu recibo de luz que un equipo convencional que es más económico en el momento, pero no a largo plazo.
- La ubicación de un equipo de aire acondicionado marca una gran diferencia en su rendimiento y consumo de energía. Si se utiliza en áreas abiertas, tardará más en lograr una temperatura ideal, que oscila entre los 22 y 25 grados centígrados.
- Cambie sus focos incandescentes por focos led que es un beneficio a largo plazo inclusive en tu recibo de luz.
Edith Tornero Ing. Industrial y de Sistemas, MBA Alta Dirección y consultor acreditado en Responsabilidad Social Empresarial. Dato de contacto: [email protected].