Científicos han descubierto unas extrañas cuchillas de hielo halladas en el segundo volcán más alto de la Tierra, albergan una comunidad de vida microscópica. Se halló que en las nieves penitentes, formaciones de nieve halladas en lo más alto de los Andes, albergan algas de la nieve. Esta es la primera vez que se ha registrado vida en estas formaciones. Esto podría dar una perspectiva de cómo sería la vida extraterrestre, pues se cree que estas formaciones existen en otros cuerpos dentro del sistema solar, incluidos Plutón y Europa, una de las lunas de Júpiter.
Las nieves penitentes son cuchillas alargadas de nieve endurecida e hielo halladas en algunos de los medio ambientes más extremos y de mayor altitud en la Tierra, regiones frías y secas por encima de los 3,900 metros. En estos lugares, la radiación ultravioleta es alta, la humedad es baja, los vientos son extremos y la temperatura fluctúa considerablemente. Esto dificulta que la vida exista.
Las nieves penitentes miden entre pocas pulgadas de alto y hasta cinco metros, y por lo regular están orientadas hacia el sol. Reciben su nombre porque se parecen a monjes rezando que visten túnicas blancas.
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A pesar de haber sido mencionadas por primera vez en la literatura científica por Charles Darwin en el siglo XIX, las nieves penitentes no se han estudiado ampliamente, debido en gran medida a su ubicación extrema y remota en las montañas de los Andes.
En un estudio publicado en la revista Arctic, Antartic, and Alpine Reasearch, los investigadores viajaron al volcán Llullaillaco de Chile, donde se forman las nieves penitentes, con el fin de estudiar estas dagas congeladas. “Esta es un área muy remota a la que es difícil acceder”, dijo en una declaración el coautor Steve Schmidt, de la Universidad de Colorado Boulder. “Toda la parte trasera de una de nuestras camionetas pickup tuvo que ser llenada con barriles de agua potable. No es algo trivial ir allí, y esa es una de las razones por las cuales estas formaciones no se han estudiado mucho”.
Se descubrió que los campos de penitentes, hallados a una altura superior a 4,800 metros, tenían porciones de hielo rojo, una señal de que existe vida microscópica en el hielo. Los análisis revelaron que las porciones contenían una comunidad de algas de la nieve que está relacionada estrechamente con otros medio ambientes alpinos y polares.
“En este medio ambiente, las penitentes proveen agua y refugio de los vientos severos, la alta radiación ultravioleta y las fluctuaciones térmicas, creando un oasis en un paisaje por lo demás extremo”, escribió el equipo.
El descubrimiento es importante pues tiene implicaciones para la búsqueda de vida alienígena en nuestro sistema solar y más allá, dicen los científicos. “Enigmáticamente, las recientes investigaciones planetarias han sugerido la existencia de estructuras similares a las penitentes en otros cuerpos planetarios de nuestro sistema solar”, concluye el equipo. “Por lo tanto, las penitentes y el medio ambiente duro que las rodea nos da una nueva analogía terrestre para estudios astrobiológicos de vida más allá de la Tierra”.
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En una declaración, Lara Vimercati, autora principal del estudio, dijo: “Las algas de la nieve se han hallado por lo general en toda la criósfera tanto en porciones de hielo como de nieve, pero nuestro descubrimiento demostró su presencia por primera vez en la elevación extrema de un sitio híper árido”. El lugar donde se hallan las nieves penitentes está cerca del desierto de Atacama, que es uno de los lugares más secos de la Tierra y es el paisaje del que se piensa que es más parecido a Marte.
Entender que la vida puede existir en los medio ambientes más extremos de la Tierra podría ayudar a los científicos a entender el tipo de lugares donde podría surgir en el sistema solar. Al momento, los investigadores creen que formas de vida microscópicas podrían vivir en la subsuperficie, el océano salino de Europa, una de las lunas de Júpiter. Esto se basa en que hemos hallado miles de especies de microbios en las profundidades de la superficie helada de la Antártida.
“Nuestro estudio muestra que no importa cuán desafiantes sean las condiciones medioambientales, la vida se abre camino donde hay disponibilidad de agua líquida”, dijo Vimercati.
Schmidt agregó: “Por lo general, nos interesamos en las adaptaciones de organismos a medio ambientes extremos. Este podría ser un buen lugar para buscar los límites superiores de la vida”.
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Publicado en cooperación con Newsweek / Published in cooperation with Newsweek
https://newsweekespanol.com/2019/01/nasa-cavidad-glaciar-antartida/