
LOS SEIS MEXICANOS DETENIDOS EN ISRAEL durante una misión humanitaria hacia Gaza regresaron este miércoles al país y denunciaron haber sufrido maltratos durante su detención.
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Sin embargo, insistieron en que el foco debe permanecer en la crisis que vive el pueblo palestino.
“Sufrimos maltrato, sí. Fuimos vejados, sí. Nos dejaron sin comer, sí. No nos daban de tomar, sí. Todo eso, sí. Pero nada de eso se compara a lo que sufren nuestros hermanos y hermanas palestinas a diario”, declaró el activista Diego Vázquez al llegar a Ciudad de México.
Vázquez pidió además al Gobierno mexicano revisar sus relaciones con empresas israelíes, subrayando que la misión de la flotilla buscaba exclusivamente entregar ayuda humanitaria. Otro de los participantes, Carlos Pérez, celebró que la acción logró generar conciencia global:
“Estamos felices de que haya movilizaciones por todo el mundo y que la gente esté volteando a ver a Palestina.”
El periodista Ernesto Ledesma, también parte del grupo repatriado, denunció igualmente abusos y tratos indignos durante su estancia en detención.
Los activistas, tres hombres y tres mujeres, formaban parte de la Global Sumud Flotilla, una caravana marítima humanitaria compuesta por 45 embarcaciones que partió desde España con el objetivo de romper el bloqueo israelí a Gaza y entregar insumos a la población.
El grupo fue interceptado por fuerzas israelíes en aguas internacionales y trasladado al centro de detención de Ketziot, en el desierto del Néguev, una prisión de alta seguridad conocida por albergar presos palestinos.
Desde México, la presidenta Claudia Sheinbaum exigió su liberación inmediata y calificó su detención de injustificada, asegurando que “no cometieron ningún delito”.
Tras su liberación, los seis fueron trasladados a Jordania, desde donde volaron de Amán a Estambul y finalmente a Ciudad de México, donde fueron recibidos por sus familiares y el canciller Juan Ramón de la Fuente.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel negó las acusaciones de maltrato y afirmó que “los derechos legales de los activistas se han respetado y se seguirán respetando plenamente”, según un comunicado publicado en X.
La Cancillería mexicana confirmó que acompañó de cerca las gestiones diplomáticas y que su prioridad fue garantizar la seguridad e integridad física de los connacionales durante todo el proceso.
La misión humanitaria se desarrolló en medio de un escenario crítico: la ONU ha declarado hambruna en la Franja de Gaza, donde más de dos años de conflicto han dejado miles de muertos y desplazados.
Israel sostiene su ofensiva contra el movimiento islamista Hamás, tras el ataque del 7 de octubre de 2023, que desató una escalada bélica sin precedentes en la región.
“No queremos que nuestra historia desvíe la atención del verdadero horror: el genocidio en Gaza”, concluyó uno de ellos.
Desde su llegada, los activistas mexicanos han reiterado que su experiencia no debe eclipsar la crisis humanitaria que atraviesan los palestinos. N