
CIENTOS DE PERSONAS PROTESTARON este lunes en La Paz contra la elección del centroderechista Rodrigo Paz Pereira como presidente de Bolivia, para denunciar supuestas irregularidades no demostradas en el conteo oficial de votos y exigir una auditoría.
Paz Pereira, economista de 58 años, venció en el balotaje del domingo con 54.5 por ciento de los votos al exmandatario de derecha dura Jorge Quiroga, según un cómputo oficial preliminar.
Luego de conocerse los resultados, Quiroga felicitó a su rival, pero anunció que haría una verificación de las actas de sufragio en los próximos días a raíz de denuncias sobre supuestas irregularidades.
Con banderas bolivianas y al grito de “fraude”, los manifestantes intentaron ingresar a la Plaza de Armas, donde se encuentra el Palacio de Gobierno y el Congreso. La policía los dispersó sin que se reportaran incidentes. Posteriormente se dirigieron a las oficinas del Tribunal Supremo Electoral (TSE) para expresar su reclamo.
“Lo que da bronca es que ha habido fraude y no se ha respetado el voto”, comentó Pablo Pérez, un estudiante de 23 años que se niega a aceptar la derrota de Quiroga.
Hace referencia a supuestas pruebas de irregularidades difundidas en redes sociales, cuya autenticidad no ha sido verificada. Los asistentes, la mayoría jóvenes, también gritaban consignas de rechazo a las promesas de campaña de Paz y de su vicepresidente Edmand Lara: “¡No queremos bonos, queremos trabajo!”.
Sin embargo, aseguraban que no era una manifestación en favor de Quiroga. “Estamos pidiendo una auditoría para que se pueda verificar toda la votación”, dijo Rahel Gandarillas, una odontóloga de 25 años.
El presidente de la justicia electoral Óscar Hassenteufel pidió este lunes de manera anticipada descartar algún engaño en el conteo de votos.
“En el sentir del TSE, ya la palabra fraude debería ser desterrada de Bolivia, no existe esa posibilidad”, declaró.
Después de 20 años de gobiernos socialistas en el país, el domingo se celebró un balotaje inédito en el que participaron dos candidatos de derecha. En la primera vuelta, la población rechazó al oficialista Movimiento al Socialismo que obtuvo apenas un 3 por ciento de las preferencias.
Con su ascenso, Bolivia cierra un largo ciclo de socialismo iniciado en 2006 por Evo Morales y en el que se nacionalizaron los recursos naturales, se rompieron relaciones con Estados Unidos y se estrecharon lazos con potencias emergentes como China, Rusia e Irán y la izquierda latinoamericana.
Paz tendrá la mayor bancada del parlamento, luego de conseguir sorpresivamente la votación más alta en la primera vuelta. La segunda más numerosa será la de Quiroga. Sin embargo, ninguno tendrá mayoría y se verán obligados a llegar a acuerdos.
Rodrigo Paz plantea una fuerte descentralización y un “capitalismo para todos”, es decir, un programa de formalización de la economía, con reducción de impuestos y eliminación de burocracia. N
(Con información de agencias)