
KIM JONG UN ABRE LA PUERTA A NEGOCIAR CON ESTADOS UNIDOS. El líder norcoreano, Kim Jong Un, afirmó que no ve ninguna razón para evitar el diálogo con Washington, siempre y cuando Estados Unidos retire su exigencia de que Corea del Norte renuncie a su arsenal nuclear. En su mensaje, incluso recordó que guarda “buenos recuerdos” del presidente Donald Trump.
El programa nuclear de Corea del Norte, sancionado por la ONU, ha sido una de las principales fuentes de tensión con Estados Unidos y sus aliados. Durante el primer mandato de Trump, ambos líderes se reunieron en tres ocasiones con la promesa de avanzar hacia la desnuclearización a cambio del levantamiento de sanciones. Sin embargo, los encuentros no generaron acuerdos concretos.
Las palabras de Kim, pronunciadas el domingo ante la Asamblea Popular Suprema, representan la primera señal de apertura al diálogo desde que Trump regresó a la Casa Blanca. El gesto llega en un contexto en el que el nuevo gobierno de Corea del Sur busca incentivar a Washington a retomar el contacto diplomático con Pyongyang.
Kim reiteró que el estatus de Corea del Norte como potencia nuclear es permanente y que Estados Unidos debe abandonar lo que calificó como “provocaciones hostiles”. Además, defendió la expansión de su arsenal balístico y nuclear, al que considera clave para disuadir posibles agresiones.
“Si Estados Unidos abandona su vana obsesión por la desnuclearización y reconoce la realidad, y busca una coexistencia pacífica genuina con nosotros, no tenemos ninguna razón para no sentarnos con Estados Unidos”, declaró Kim en un discurso difundido por la Agencia Central de Noticias Coreana.
En su mensaje, insistió en que las armas nucleares de su país “no serán moneda de cambio” y que la presión militar o económica de Washington y sus aliados “nunca tendrá éxito”.
Kim, refiriéndose a la República Popular Democrática de Corea, enfatizó: “Aunque Estados Unidos y sus aliados pidan con entusiasmo la ‘desnuclearización’ durante 10, 20, 50 o incluso 100 años, el hecho de que Corea del Norte posea armas nucleares seguirá siendo inalterable para ellos, les guste o no”.
Por su parte, Trump comentó a la prensa el 26 de agosto: “Me llevo muy bien con él. Espero reunirme con Kim Jong Un en el futuro, cuando sea oportuno”.
La incógnita ahora es cómo responderá la administración Trump a la postura de Kim, que insiste en que sus armas nucleares no están en negociación. La evolución de este pulso podría definir el futuro de la seguridad en la península de Corea y la política exterior de Estados Unidos en Asia. N