Lo que comenzó como una sospecha compartida en grupos de Facebook ha escalado a una crisis de confianza y dignidad. Decenas de familias en Ciudad Juárez viven momentos de angustia tras descubrir que las urnas entregadas por funerarias no contenían restos humanos, sino tierra o materiales de construcción. El epicentro del escándalo es el crematorio Plenitud, subcontratado por al menos cinco casas funerarias locales, y ahora bajo investigación por el delito de ocultamiento de cadáveres y violaciones a la Ley General de Salud.
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EL SILENCIO EN PALACIO NACIONAL
La ola de indignación pública se ha visto alimentada por la falta de respuestas claras por parte de las autoridades federales. Cuestionada por periodistas, la presidenta Claudia Sheinbaum evitó abordar a fondo el tema durante su conferencia mañanera, limitándose a señalar que el gabinete de Seguridad daría un informe el próximo martes 8 de julio, sin detallar las acciones inmediatas.
“No es un tema para dos minutos”, dijo Sheinbaum posponiendo respuestas.
La situación involucra a 383 cuerpos encontrados entre el 26 y 29 de junio en instalaciones que deberían haber sido destinadas a la cremación.
Hoy en la #MañaneraDelPueblo de Claudia Sheinbaum 👩🏻
Sobre los cuerpos encontrados en un crematorio de Chihuahua, Claudia Sheinbaum (@Claudiashein) asegura que se espera al gabinete de seguridad y el caso lo atiende la fiscalía estatal.
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— MVS Noticias (@MVSNoticias) July 3, 2025
LAS FUNERARIAS IMPLICADAS
De acuerdo con Proceso, entre los restos hallados figuran 218 hombres, 149 mujeres, 16 de sexo no determinado y 4 menores de edad. La Fiscalía General del Estado de Chihuahua, encabezada por César Jáuregui, ha informado la detención del dueño del crematorio y su único empleado, mientras se investiga la responsabilidad de funcionarios por presuntas omisiones en la supervisión del lugar.
Los colectivos locales advierten que la falta de controles legales y sanitarios convierte a los crematorios mal regulados en un riesgo para los derechos humanos y la verdad. Los grupos señalan que estos sitios podrían ser usados como herramientas para la desaparición de personas.
En un intento por contener la crisis, el vocero de la Fiscalía, Eloy García Tarín, aseguró que las funerarias serán civilmente responsables de cubrir los gastos de una nueva despedida para las familias. Si estas no pueden hacerlo por vía judicial, será el Gobierno del Estado quien asumirá el costo. Las familias podrán decidir si desean ahora la cremación o la inhumación de los cuerpos recuperados.
Las funerarias señaladas incluyen a Luz Divina, Protecto Deco, Del Carmen, Latinoamericana y Amor Eterno. Aunque inicialmente se implicó a Funerales Ramírez, la Fiscalía la descartó en su más reciente actualización del caso.
La Unión de Funerarios de Chihuahua ha expresado públicamente su disposición a colaborar con la Fiscalía. Su representante, Marcelo Ruiz Cantú, reconoció la corresponsabilidad del gremio y prometió no eludir su deber moral y legal con las familias afectadas.
La última opción que vamos a tomar va a ser la de escabullirnos de nuestra responsabilidad”, expresó Marcelo Ruiz Cantú, líder de la Unión de funerarias en Ciudad Juárez.
“Las funerarias que conforman la Unión son (de) personas que están de pie, que están ubicables, y que en cualquier momento que la Fiscalía lo solicite van a estar ahí presentes”, añadió Ruiz Cantú.
LA INCERTIDUMBRE DE LAS FAMILIAS
El caso se remonta a 2020 cuando el presunto crematorio Plenitud comenzó a ofrecer estos servicios a distintas funerarias de Ciudad Juárez, por lo que deudos que solicitaron una cremación en el periodo de los últimos 5 años han verificado los restos pulverizados de sus familiares encontrando irregularidades.
Este escándalo revela una dolorosa verdad: el tratamiento de los cuerpos en México aún carece de garantías suficientes, y la supervisión institucional no ha estado a la altura del dolor que supone perder a un ser querido. El caso Plenitud exige no solo justicia penal, sino una profunda revisión del sistema funerario nacional y de las respuestas oficiales ante una crisis de humanidad. N
(Con información de El Diario de Juárez)