En una jornada electoral sin precedentes a nivel mundial, México celebró el domingo elecciones judiciales para designar a jueces y magistrados de todos los niveles. Hubo una participación preliminar que rondó del 12.56 al 13.2 por ciento de la participación ciudadana, según el reporte de Guadalupe Taddei, presidenta del INE. En un sondeo hecho por AFP en las casillas del centro de Ciudad de México, el proceso ha generado más preguntas que respuestas sobre la autonomía del sistema judicial frente al poder político y el crimen organizado.
En total, fueron elegidos cerca de 2,680 funcionarios, desde ministros de la Suprema Corte hasta jueces de primera instancia, como parte de una ambiciosa reforma constitucional impulsada por el oficialismo. Los resultados, sin embargo, se conocerán en los próximos días, una vez concluido el conteo oficial por parte del Instituto Nacional Electoral (INE).
La participación ciudadana fue de 12.56% a 13.2%
Claudia Sheinbaum, presidenta de México, se declaró satisfecha con la participación y el resultado obtenido.
“La elección histórica del Poder Judicial este 1 de junio de 2025 ha sido todo un éxito. Cerca de 13 millones de mexicanas y mexicanos salieron a ejercer por primera vez en la historia su derecho a decidir quienes deben ser las y los nuevos ministros, magistrados y jueces”, dijo en un comunicado en cadena nacional.
“No debemos olvidar que el actual Poder Judicial, que algunos defienden, ha sido responsable de favorecer a miembros de la delincuencia organizada y liberado miles de millones de pesos de la delincuencia de cuello banco”, expresó la mandataria.
Día histórico: primera elección del Poder Judicial. pic.twitter.com/gtvO5AS9xG
— Claudia Sheinbaum Pardo (@Claudiashein) June 2, 2025
JUSTICIA EN MANOS DEL VOTO POPULAR
La elección forma parte de la reforma promovida por el expresidente Andrés Manuel López Obrador (2018-2024), quien reapareció públicamente tras ocho meses de ausencia para emitir su voto en el estado de Chiapas.
“Es la primera vez en la historia, por eso quise participar”, afirmó a los medios el expresidente.
Para su sucesora, la actual presidenta Claudia Sheinbaum, el ejercicio electoral es clave para combatir la corrupción y la impunidad en el Poder Judicial. Sin embargo, sus críticos denuncian una estrategia de control político disfrazada de democratización.
“La gente que dice que esto está amañado lo que quiere es mantener los privilegios y la corrupción”, aseguró Sheinbaum
La presidenta ejerció su voto en una casilla cercana al Palacio Nacional, donde fue recibida entre vítores de sus simpatizantes.
VOTAR A CIEGAS
Uno de los mayores desafíos de la jornada fue la falta de información sobre los aspirantes. Leslie Moreno, abogada de 30 años, comentó a este medio que sufragar fue “más laborioso” que en elecciones anteriores.
“No conoces a los candidatos, salvo los que hacían videos en TikTok”, dijo.
El INE reconoció que se trató de una elección “sin precedentes” y advirtió que la participación podría esperarse de hasta un 20%, sin embargo seguía siendo una cifra baja considerando la magnitud del cambio estructural que representa.
CANDIDATURAS POLÉMICAS Y CUESTIONABLES
Organizaciones civiles como Defensorxs identificaron al menos 20 aspirantes con antecedentes preocupantes. Entre ellos destaca Silvia Delgado, exabogada del narcotraficante Joaquín “Chapo” Guzmán, quien se postuló como jueza en Chihuahua.
“Toda persona tiene derecho a que un abogado lo asista”, declaró Delgado en defensa de su trayectoria.
Otro caso es el de Fernando Escamilla, exrepresentante legal de Miguel Ángel Treviño, exlíder del extinto y violento cártel de Los Zetas. Además, Leopoldo Chávez, candidato en Durango, fue encarcelado casi seis años en Estados Unidos por tráfico de metanfetaminas.
“Nunca me he vendido como el candidato perfecto”, afirmó en un video publicado en redes sociales.
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¿DEMOCRATIZACIÓN O LIBRE ACCESO AL CRIMEN?
La reforma judicial ha polarizado opiniones. Arturo Giesemann, jubilado de 57 años, aseguró que votó motivado por “el asco” que le provoca el sistema judicial actual. “Está lleno de corruptos”, sentenció.
Por otro lado, cientos de ciudadanos marcharon el domingo por Paseo de la Reforma para protestar contra lo que consideran una “farsa electoral” diseñada para someter al Poder Judicial. “Esta elección manda a la tumba al único contrapeso que teníamos contra el Ejecutivo”, declaró Ismael Novela, empleado de 58 años.
Expertos como Margaret Satterthwaite, relatora especial de la ONU sobre la independencia judicial, advierten que este método de elección popular puede ser más vulnerable a la infiltración del crimen organizado. “Existe el riesgo de que el electorado no elija a los candidatos por su mérito”, señaló en entrevista con la AFP.
David Shirk, investigador de la Universidad de San Diego, matiza que la mayor parte de la corrupción judicial en México se concentra en las fiscalías y las fuerzas del orden, más que en los tribunales.
EL RETO DE ELEGIR A MÁS DE 2,000 JUECES
Entre los requisitos para postular estaban contar con título en derecho, experiencia profesional, buena reputación y no tener antecedentes penales. No obstante, muchos ciudadanos señalaron no tener claridad sobre el perfil de los candidatos.
Luis Méndez, ingeniero de 62 años residente en Guadalajara, dijo que votó porque considera que “el Poder Judicial ha sido un desastre por años”. En su opinión, esta elección representa una oportunidad para limpiar una institución “que ha perjudicado a la nación”.
Para 2027 está prevista una segunda ronda de comicios en la que se elegirán otros 4,000 cargos judiciales, completando así el ambicioso rediseño institucional que propone el oficialismo.
UN MODELO QUE GENERA DEBATE GLOBAL
A nivel internacional, esta elección ha generado atención y escepticismo. Mientras algunos la consideran un ejercicio de democratización sin precedentes, otros temen que siente un precedente riesgoso para la independencia de los jueces, una pieza clave en cualquier democracia.
El futuro de la justicia mexicana dependerá, en gran medida, de si este experimento logra crear un sistema más equitativo y menos corrupto, o si por el contrario, termina por debilitar una de las últimas instituciones autónomas del país. N
(Con información de AFP)