La directora del Observatorio Ciudadano de León (OCL),Mayra Legaspi Tristán, advirtió que es imperativo implementar una política pública integral y fomentar un cambio cultural para frenar esta problemática.
En León, la conducción imprudente, especialmente bajo los efectos del alcohol y a exceso de velocidad, ha desencadenado una alarmante ola de muertes viales, hasta el año pasado, Guanajuato fue la cuarta entidad del país con mayor incidencia de homicidios culposos derivados de accidentes de tránsito, con 490 carpetas de investigación abiertas.
Los datos recientes revelan una preocupante tendencia en los homicidios culposos relacionados con accidentes viales en León. En 2023, se registraron 31 homicidios culposos en la ciudad, de los cuales el 97% fueron por percances viales, es decir, 30 personas fallecieron en accidentes de tránsito.
Sanciones actuales por conducir en estado de ebriedad incluyen arresto administrativo de entre 20 y 36 horas, así como la pérdida del vehículo.
La gravedad de la sanción puede depender de la cantidad de alcohol en sangre o en aire espirado. Además, el Código Penal de Guanajuato establece que el homicidio culposo se sanciona con penas de entre uno y cinco años de prisión, y si el conductor responsable estaba bajo el efecto del alcohol o sustancias, la pena carcelaria puede ser de entre dos y cinco años.
Mayra Legaspi enfatizó la necesidad de una transformación en la cultura vial y de la aplicación de políticas públicas para atender el problema.
“Necesitamos una política pública de largo alcance y un cambio cultural. Como sociedad estamos inmersos tanto autoridades como ciudadanía. Nosotros también debemos ser responsables”.
Además, propuso la creación de una unidad especializada dentro de las corporaciones de seguridad que analice a fondo los hechos viales que constituyen homicidios dolosos:
“Lo cierto es que hay puntos bien identificados en donde suceden este tipo de delitos, en donde tendríamos que evitar la repetibilidad, que ninguna persona más vuelva a perecer en las calles”.
La directora del OCL también destacó la importancia de atender variables como el exceso de velocidad y el diseño de las vialidades que provocan los accidentes:
“Resulta importante que el Congreso revise las distintas propuestas en torno al tema, pero penas más duras tampoco son la solución completa del tema. Claro que hay que atender la impunidad si ya se tiene la detención de los presuntos victimarios, que se les dé un tratamiento más expedito para que se llegue a condenas justas; pero desde el análisis que hemos realizado en torno a la movilidad urbana, también tiene que ver la infraestructura, a todos nos chocan los topes, pero son parte de las estrategias para reducir la velocidad”.
Finalmente, la activista concluyó que la alarmante cifra de muertes por accidentes viales en León exige una respuesta inmediata y coordinada entre autoridades y ciudadanía.