Tras más de 140 años de construcción, la extraordinaria basílica de la Sagrada Familia de Barcelona finalmente podría estar terminada. La iglesia, diseñada por el famoso arquitecto catalán Antoni Gaudí, combina formas góticas y arte nouveau en lo que se considera uno de los edificios más bellos de la Tierra —aunque el autor George Orwell alguna vez lo llamó el más feo del mundo.
Ahora avanza hacia su fecha de finalización prevista para 2026 con la ayuda de dos grúas Liebherr. Después de que los equipos terminaron las cuatro torres de los Evangelistas en noviembre de 2023 solo queda una aguja más para completar el grupo de seis torres centrales, la última fase importante del proyecto.
Las grúas desempeñarán un papel crucial en la finalización de la Torre de Jesucristo: el pináculo de la basílica, que alcanzará una altura de 172 metros, con lo que se convertirá en la iglesia más alta del mundo.
GRÚAS “MÁGICAS” PARA LA BASÍLICA DE LA SAGRADA FAMILIA
“El departamento de construcción de la basílica de la Sagrada Familia eligió estas grúas por dos motivos principales: en primer lugar, su diseño plegable minimiza el impacto en los edificios circundantes y, en segundo lugar, su adaptabilidad a las necesidades específicas de la zona”, afirma Fernando Villa, director de construcción y tecnología de la basílica.
La finalización de uno de los edificios más famosos de España no solo cumplirá la visión de Gaudí, sino que también representará un logro significativo de la ingeniería y la construcción modernas.
Gaudí se hizo cargo del proyecto por primera vez en 1883 y lo transformó en lo que llamó “el futuro de la Cataluña moderna”. Su repentina muerte en 1926 (fue atropellado por un tranvía que cruzaba la calle), cuando la iglesia solo tenía 20 por ciento de avance, es uno de los numerosos obstáculos que ha enfrentado en su construcción.
La Guerra Civil Española de la década de 1930 detuvo el progreso y muchos de los planos originales de Gaudí se perdieron o fueron destruidos en un incendio. Más recientemente, la construcción se detuvo durante la pandemia de covid-19. Pero el resurgimiento del turismo desde entonces ha ayudado a proporcionar los fondos necesarios para impulsar el proyecto hacia su finalización.
UNA IGLESIA QUE NO TIENE PERMISO DE CONSTRUCCIÓN
El año pasado, aproximadamente 4.7 millones de personas visitaron el sitio. La venta de entradas, que oscila entre 28 y 43 dólares, generó alrededor de 135 millones de dólares, la mitad de los cuales se asigna a esfuerzos de construcción.
Un desafío notable surgió en 2016, con el descubrimiento de que la iglesia se construyó sin el permiso adecuado, una situación descrita como una “anomalía histórica” por los funcionarios de la ciudad. Esto se rectificó en 2019.
El uso de técnicas de construcción modernas es fundamental para completar la visión de Gaudí. Se emplearon paneles de piedra prefabricados para acelerar la construcción de las torres restantes, un método recomendado por la empresa de ingeniería Arup.
“Se espera que la Capilla de la Asunción esté terminada en 2025 y la Torre de Jesucristo, en 2026”, según la Fundación La Sagrada Familia. Es probable que continúen trabajos decorativos y escultóricos menores hasta finales de la década, y sigue un debate sobre cómo construir una escalera hacia la entrada principal que, según los planes actuales, requeriría el desalojamiento de cientos de familias y negocios.
Cuando se le preguntó, hace un siglo, por qué el proyecto tardaba tanto, se citó a Gaudí diciendo: “Mi cliente no tiene prisa”. No obstante, su espera podría terminar pronto. N
(Publicado en cooperación con Newsweek. Published in cooperation with Newsweek).