AstraZeneca admitió por primera vez en documentos judiciales que su vacuna contra el covid-19 puede causar un efecto secundario poco común: trombosis. La empresa farmacéutica fue demandada de manera colectiva al afirmar que decenas de individuos fallecieron, mientras que otros resultaron seriamente heridos, tras la inmunización.
De acuerdo con el diario británico The Telegraph, AstraZeneca aceptó en un documento legal presentando ante el Tribunal Superior de Reino Unido que su vacuna contra el virus SARS-CoV-2 “puede, en casos muy raros, causar trombosis con síndrome de trombocitopenia (TTS)” y aseguró, más adelante, desconocer el mecanismo causal.
En abril de 2021, un año después de iniciar la pandemia, la Agencia Reguladora de Medicinas y Cuidados para la Salud del Reino Unido (MHRA, por sus siglas en inglés) identificó 30 casos de unos “raros coágulos de sangre”, entre los 18.1 millones de personas vacunadas con AstraZeneca a finales de marzo.
Según medios internacionales, de los 30 incidentes, 22 correspondieron a trombos cerebrales venosos (CVST) y ocho a otros problemas relacionados con la coagulación de sangre con bajas plaquetas.
Ahora, las víctimas, así como familiares de personas fallecidas, están pidiendo que se pague un valor estimado de 100 millones de libras esterlinas por el daño causado, a tenor de The Telegraph.
LA OMS INFORMÓ EN 2022 DE LA TROMBOSIS TRAS LA VACUNA ASTRAZENECA
En junio de 2022, incluso la Organización Mundial de la Salud (OMS) informó sobre un nuevo efecto adverso “muy raro” de la vacuna AstraZeneca: la TTS. Además, dio a conocer la notificación de casos del síndrome de Guillain-Barré (trastorno autoinmunitario afecta los nervios) tras recibir este biológico. Pero en ese entonces, “no se puedo confirmar ni descartar la relación causal con esta vacuna”.
“Se ha notificado un nuevo tipo de evento adverso muy raro, conocido como síndrome de trombosis con trombocitopenia, tras la administración de esta vacuna. Este síndrome comporta alteraciones de la coagulación sanguínea graves y poco frecuentes asociadas a recuentos plaquetarios bajos”, apuntó la OMS.
Un portavoz de AstraZeneca comentó a Newsweek que esta vacuna había sido aprobada por agencias reguladoras en función de su eficacia y, que tanto los ensayos clínicos como los datos del mundo, han demostrado que tiene “un perfil de seguridad aceptable”.
Entre las víctimas está Kam Miller, cuyo esposo Neil murió en mayo de 2021 a la edad de 50 años debido a la TTS. Su caso fue presentado el 4 de diciembre de 2023. En esa ruta, Lisa Shaw, periodista de radio, perdió la vida después de recibir el biológico de la empresa farmacéutica en abril de 2021. Según el grupo litigante, provocó la aparición de coágulos de sangre en su cerebro.
Otros demandantes sobrevivieron, pero quedaron con secuelas. El grupo litigante dijo que Jane Wrigley, otra víctima, tiene una movilidad “extremadamente limitada”. Un portavoz de Leigh Day, el bufete de abogados que representa a los perjudicados, compartió a Newsweek que hasta el momento se habían presentado más de 37 reclamos. N