COMO SI LA CRISIS climática no fuera ya bastante grave, un estudio reciente reveló que la capa de hielo de Groenlandia se está derritiendo mucho más rápido de lo que los científicos habían creído hasta ahora.
Esto significa que, mucho antes de lo que se pensaba, cientos de millones de personas en todo el mundo se verán afectadas con inundaciones y eventos climatológicos relacionados.
Además de que muchos de los impactos más adversos e irreversibles de la emergencia ambiental podrían estar más cerca de los que pensamos.
LA TIERRA SE CALIENTA
En esta década, el hielo de Groenlandia se ha derretido siete veces más rápido que en la de los años 90, según un estudio publicado por Nature en el que participaron más de cien investigadores de 50 organizaciones internacionales.
Lo más alarmante es que la escala y la velocidad en la que el hielo se está derritiendo es mucho mayor de lo que señalaba el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático de la ONU (IPCC). Eso significa que es probable que el nivel del mar aumente 67 centímetros en 2100.
La década de 2010 a 2019 fue la más caliente jamás observada, según la ONU, lo que confirma el inexorable calentamiento climático de la tierra, caracterizado por el crecimiento de los fenómenos meteorológicos extremos.
Los análisis de la Organización Meteorológica Mundial (OMM) confirman la información suministrada por el monitor climático de la Unión Europea y de la NASA a principios de este año, que muestran que 2019 fue el segundo más caluroso jamás registrado, después de 2016.
Y el panorama para 2020 no se ve mejor.
La OMM prevé que en 2020 y en las décadas por venir habrá muchos más fenómenos meteorológicos intensos, alimentados por niveles récord de emisión de gases de efecto invernadero que retienen el calor en la atmósfera.
“El año 2020 comenzó ahí donde 2019 terminó, con acontecimientos meteorológicos y climáticos de fuerte impacto”, como en Australia, que “experimentó en 2019 su año más caliente y más seco nunca registrado, lo que preparó el terreno a inmensos incendios que fueron muy devastadores”, señaló la OMM en un comunicado.
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Desde los años 1980, cada década fue más caliente que la anterior y, según la OMM, la tendencia continuará.
Según la agencia especializada de la ONU, la temperatura mundial anual en 2019 superó en 1.1°C el promedio registrado en la época preindustrial (1850-1900). De seguir así, la temperatura aumentaría de 3 a 5 grados Celsius de aquí al fin de siglo, advirtieron.
El Acuerdo de París busca que la temperatura global no suba más de entre 1.5 y 2°C, pero expertos han señalado que incluso si los cerca de 200 países firmantes respetan sus compromisos de reducción de gases de efecto invernadero, el calentamiento podría superar los 3°C para fin de siglo.
Los científicos ya demostraron que cada medio grado suplementario aumenta la intensidad o la frecuencia de las canículas, tempestades, sequías o inundaciones.
CONSECUENCIAS DEL CALOR
Andrew Shepherd, de la Universidad de Leeds, uno de los líderes de la investigación publicada por Nature, explica que, “como regla general, cada centímetro de aumento en el nivel del mar significa que otros seis millones de personas son expuestas a inundaciones costeras en todo el planeta”.
O sea que, si el hielo de Groenlandia se sigue derritiendo a esta velocidad, “provocará que 100 millones de personas sufran inundaciones cada año para finales de este siglo. Esto significaría un total de 400 millones de personas afectadas por inundaciones con todo el aumento del nivel del mar”.
Y no se trata de inundaciones leves o poco probables. Shepherd asegura que “ya están comenzando a ocurrir y serán devastadoras para las comunidades costeras”. El aumento del nivel del mar también eleva el riesgo de mareas, tormentas, huracanes y otros fenómenos meteorológicos potenciados por el calentamiento global.
A medida que se derrite, el hielo de Groenlandia contribuye directamente al aumento del nivel del mar porque, a diferencia del hielo marino flotante (como los icebergs), este descansa sobre una gran masa de tierra.
¿ESO QUÉ SIGNIFICA PARA MÉXICO?
El Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC) señala que las características geográficas de México y las condiciones sociales y económicas desfavorables que viven algunos sectores lo hacen un país altamente vulnerable a los efectos adversos del cambio climático, entre ellos las inundaciones.
El instituto señala que ya es posible ver estos efectos adversos en el incremento de las sequías, la llegada temprana de las épocas de calor, mayores inundaciones, tormentas y huracanes más intensos, y hasta en enfermedades infecciosas como el dengue o el chikungunya.
“Estos eventos impactan gravemente a los ecosistemas, sobre todo si ya presentaban señales de degradación. Los impactos hacen más grandes los problemas sociales y económicos: desigualdades, pobreza y seguridad alimentaria, y afectan más a las poblaciones marginadas”, apunta el INECC.
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¿cuál es la causa de todo esto? De acuerdo con el estudio, aproximadamente la mitad de la pérdida de hielo de Groenlandia en las últimas décadas se debe al derretimiento causado por las temperaturas atmosféricas, que han aumentado mucho más rápido en el Ártico que el promedio mundial.
La otra mitad fue provocada porque el ritmo con el que el hielo de los glaciares llega al mar se ha acelerado gracias al calentamiento del océano.
Otros de los factores globales son el aumento del dióxido de carbono en la atmósfera o la deforestación. A estos se suman situaciones regionales: Groenlandia se encuentra en el hemisferio norte, cerca de grandes emisores de gases de efecto invernadero como Estados Unidos y China.
Además, según la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica estadounidense (NOAA), el verano de este año fue el más caluroso jamás registrado en el hemisferio norte.
¿QUÉ NOS DEPARA EL FUTURO?
Una de las peores consecuencias de este derretimiento sería la subida del nivel del mar. El Laboratorio de Propulsión a Reacción de la NASA ha desarrollado un sistema de predicción para conocer los posibles escenarios ante este problema.
Este permite predecir qué ciudades se verán afectadas a medida que se derriten porciones de capas de hielo debido al calentamiento global, como los glaciares en Groenlandia.
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En el caso de México, por ejemplo, en un escenario extremo, decenas de ciudades quedarían bajo el agua. Cancún, Veracruz, Ciudad del Carmen, Tabasco, Acapulco, Colima, Puerto Vallarta, Mazatlán, Tampico y Cabo San Lucas serían algunas de las más afectadas con un aumento de solo un metro en el nivel del mar.