La periodista marroquí Hayar Raisuni y su prometido, Amin Refat, fueron condenados este lunes a un año de prisión cada uno por un delito de “aborto ilegal” y “sexo no marital”.
El único supuesto de aborto admitido en Marruecos es el de riesgo para la madre, aunque solo en el caso de que el marido esté de acuerdo.
El Tribunal de Primera Instancia de Rabat condenó además a dos años de prisión y 500 dirhams (46 euros) de multa al médico que realizó el aborto, que estará inhabilitado para ejercer durante dos años.
La ayudante del médico también fue condenada a 8 meses de prisión suspendida y el anestesista, a un año de prisión suspendida.
Raisuni trabaja para el periódico independiente ‘Ajbar al Yaum’. Fue detenida el 31 de agosto junto a su prometido, Amin Refat, a la salida de la consulta de un médico en Rabat.
El médico y otras dos personas que trabajaban en la clínica fueron igualmente detenidos por haber practicado un aborto.
La defensa denunció durante el juicio que tras ser detenida, fue llevada por la policía al Hospital Universitario de Rabat, donde sufrió contra su voluntad y fuera de cualquier procedimiento legal una intervención de segunda opinión médica de una “violencia extrema para hacerla confesar” sobre actos de su vida privada sin relación con el caso, informa la edición magrebí de The Huffington Post.
“Nada que ver con su profesión”
Por su parte, el fiscal negó la naturaleza política del caso y ha asegurado que su detención y procesamiento “no tiene nada que ver con su profesión”.
“Es debido a su visita a una clínica (…) y a la información obtenida por la policía judicial sobre la práctica habitual de abortos en ese lugar”, ha indicado.
“Son actos constituyen delitos penales en virtud del derecho penal, a saber: la práctica del aborto y la aceptación y participación en aborto por parte de terceros”, ha remachado.
La periodista negó los cargos y en una carta publicada por su periódico el 4 de septiembre relata que fue interrogada sobre sus ideas y escritos políticos. Raisuni publicó en mayo una serie de entrevistas con Ahmed Zefzafi, padre de Naser Zefzafi, líder del movimiento de protesta Hirak el Rif.
También ha publicado artículos críticos con las autoridades y el director del periódico para el que trabaja, Taufik Buacrín, fue condenado a doce años de cárcel por delitos políticos en noviembre de 2018.
Además, denuncia que las autoridades pretenden intimidar a su tío, Suleimán Raisuni, activista de Derechos Humanos y periodista.
Raisuni fue llevada a una comisaría y el 2 de septiembre fue presentada ante la Fiscalía y acusada formalmente de mantener relaciones fuera del matrimonio y “consentir un aborto”.
La Fiscalía de Rabat reveló el 5 de septiembre los resultados de las pruebas periciales médicas, lo que supone una “violación escandalosa” de su privacidad, e informó de que la clínica estaba siendo vigilada por estos abortos.
Liberación inmediata
Amnistía Internacional pidió incluso antes de conocerse la sentencia la liberación inmediata de Raisuni y los otros tres detenidos, ya que el Derecho Internacional recoge el derecho a la autonomía corporal y personal de las mujeres, incluida la libre elección de su vida sexual y reproductiva.
“La criminalización de los servicios sanitarios que solo necesitan las mujeres, como el aborto, supone una discriminación de género”, ha remachado la ONG.
“Este caso es un terco recordatorio de lo urgente que es la derogación de las leyes marroquíes que criminalizan el sexo fuera del matrimonio y el aborto. Estas normas violan varios derechos de las mujeres, incluidos los derechos a la autonomía corporal y personal, el derecho a la no discriminación, a la privacidad y a la salud”, ha argumentado Morayef.
“En lugar de intimidar a Hayar Raisuni encausándola por delitos injustos, las autoridades deberían ponerla en libertad de inmediato y sin condiciones y retirar todos los cargos contra ella y los demás implicados en este caso”, ha añadido Morayef.