El exgobernador de Oaxaca, Ulises Ruiz Ortiz (2004-2010), reapareció para anunciar su apoyo a José Antonio Meade a quien ofreció la “movilización” del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en los comicios del primero de julio.
En un video difundido a través de redes sociales, afirmó que la única encuesta válida es la del próximo domingo que definirá en las urnas al próximo presidente de la república.
En el mensaje de cinco minutos con 35 segundos, recriminó “al grupo de notables” del tricolor que desde Los Pinos eligen a los integrantes del Comité Ejecutivo Nacional de su partido, el hecho que el 80 por ciento de la sociedad mexicana rechace al organismo político.
El exmandatario oaxaqueño, –en cuyo periodo se gestó un movimiento político social en su contra, luego del fallido desalojo de profesores adherentes a la Sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) del Zócalo de la ciudad, ocurrido el 16 de junio de 2006— convocó a militantes y simpatizantes a reflexionar su voto.
Y llamó a quienes no han decidido su sufragio, o están en otras organizaciones políticas, a elegir la propuesta que “representa honradez, experiencia, conocimiento y el mejor proyecto de seguridad para las familias de México”.
Refirió que la corriente Democracia Interna que encabeza al interior del Revolucionario Institucional nació hace dos años y ha sido severa en sus críticas, pero también sabe reconocer las buenas decisiones, por lo que celebró la postulación de un candidato externo.
“Otro acierto, aunque un poco tardío es la designación de René Juárez, un priista orgánico para conducir la última fase en este proceso electoral”, recalcó.
Y a partir del 2 de julio, adelantó, Democracia Interna volverá para exigir los cambios que se necesitan: la renovación del Comité Ejecutivo Nacional, a través de la consulta directa a los militantes y simpatizantes.
El ex gobernante, quien llegó al gobierno en medio de protestas por un presunto fraude electoral, sostuvo que el PRI busca reivindicar las causas de la nación, comprometido con los pobres de México, así como con el combate a la corrupción de fondo, “empezando por el presidente de la República”.
“Vamos a estar atentos porque hay quienes se quieren apoderar del PRI, y a esos les decimos que: este gobierno ya está terminando y ya van de salida. Los dueños del partido son los militantes y vamos a devolvérselos, para que decidan quienes van a ser sus dirigentes y candidatos”, dijo.