Por ausencia de inversión y competencia desleal, la Cuenca Lechera de Tizayuca, establecida en 1976, no sobrevivirá 2018, advirtió Álvaro González Muñoz, dirigente del Frente Nacional de Productores y Consumidores de Leche (FNPCL).
Durante el año pasado, entre seis y ocho establos suspendieron su producción, indicó el dirigente, quien recordó que de 130 espacios donde se alojaba ganado bovino, actualmente están vigentes menos de 65.
“Yo creo que no (sobrevivirá) la cuenca a este año, por las condiciones del sector, todos los días se importan más toneladas de leche en polvo”, alertó.
De 2000 a la fecha ha cerrado la mitad de establos, y de producir hasta 4 millones de litros de leche a la semana, ahora sólo se comercializan 300 mil.
Además de los altos niveles de importación de leche en polvo que mantiene el país, otro factor que resta competitividad a los productores es el precio al que las empresas pagan el lácteo.
“Esa competencia desleal que estamos atravesando en todo el país es algo que no vamos a poder soportar; en México está en riesgo cerca de medio millón de empleos, y en Hidalgo debe haber unas 50 mil personas que se dedican a la actividad de la leche, y no vamos a ser la excepción”, advirtió.
El dirigente describió que producir un litro cuesta 7.30 pesos; sin embargo, el precio que se paga a ellos por el alimento básico es de 6.80 pesos, lo que significa una pérdida de hasta 50 centavos por litro.
“La expectativa es que los establos no sobrevivan, las condiciones son extremadamente difíciles, lo que nos está pasando es que no podemos crecer al ritmo que nos demanda la industria porque no tenemos recursos para invertir”, lamentó.
González Muñoz indicó que la organización que encabeza solicitará al gobierno del estado que brinde atención a dicho complejo lechero.
- La Cuenca Lechera de Tizayuca fue un modelo muy exitoso en su tipo, replicado, incluso, por otros países, recordó Álvaro González Muñoz, dirigente del Frente Nacional de Productores y Consumidores de Leche (FNPCL).
- El gobierno federal buscaba sacar de la Ciudad de México 968 establos, que habían sido absorbidos por la mancha urbana.
- el espacio albergó hasta 30 mil vacas y 12 mil becerras.
La crisis de la cuenca comenzó en 1994, de acuerdo con el dirigente, cuando el gobierno federal comenzó a privatizar recursos públicos.
Yuvenil Torres I Pachuca