Los 13 niños y jóvenes Turpin deberían tener la oportunidad de confrontar a sus padres cara a cara para que puedan decirles que “los odian” o “los perdonan”, dijo Natascha Kampusch, víctima de secuestro.
Los niños necesitarán encontrar la forma de perdonar a David y Louise Turpin “o dejarlos atrás”, mencionó la mujer que fue secuestrada y encerrada en un sótano durante ocho años.
“Les ayudará a comenzar un proceso donde puedan hacer frente a toda la situación y ser más estables”, dijo Kampusch a The Daily Telegraph.
Kampusch tenía 10 años cuando fue secuestrada en la capital austríaca de Viena y llevada a la ciudad de Strasshof an der Nordbahn por Wolfgang Priklopil.
Allí la mantuvo en una bodega secreta, obligándola a cocinar y limpiar para él, mientras la maltrataba y la mataba de hambre.
Kampusch escapó en 2006, a los 18 años cuando encontró una oportunidad después de que Priklopil le había dado más libertades.
Ella no tuvo la oportunidad de enfrentarse a su secuestrador porque Priklopil se suicidó saltando frente al tren después de descubrir que la policía lo perseguía.
La sobreviviente, que ha escrito dos libros sobre su cautiverio y su lucha por encontrar su lugar en el mundo, dijo que los niños Turpin podrían tener una especie de “cierre” al enfrentar a sus padres.
“Les ayudará a comenzar un proceso donde puedan hacer frente a toda la situación y ser más estables”, dijo al Telegraph.
Los Turpin fueron imputados con cargos de tortura, confinamiento y abuso infantil por mantener a sus hijos, de dos a 29 años, en condiciones inmundas, encadenar a algunos a sus camas y privarlos de comida en su hogar de California.
David y Louise Turpin se declararon no culpables de todos los cargos, que conllevan una pena de entre 94 años de prisión y cadena perpetua.
David Turpin también fue acusado de un cargo de acto lascivo contra una de sus hijas de 14 años.
La pareja, de 56 y 49 años, fue arrestada en su casa en Perris, California, a principios de este mes cuando su hija de 17 años escapó de una ventana y llamó a la policía. Actualmente se mantienen bajo fianza por 12 millones de dólares cada uno y deben regresar al tribunal el 23 de febrero.
Pero sin importar el veredicto, dice Kampusch, “los niños necesitarán un cierre para poder avanzar, así que sí, necesitan la oportunidad de ver a sus padres, incluso si es solo para decir: Te odio, eres un monstruo”.
Permanecer juntos como familia sería vital para los hermanos que comienzan una nueva vida “, dijo.
“El mundo será un lugar confuso y difícil para ellos”, dijo. “Para mí, fue difícil. Austria es un país pequeño y me quedé porque mi familia estaba aquí. Estados Unidos es grande y todos hablan el mismo idioma, por lo que debería ser más fácil para ellos mudarse a otro lugar y comenzar una nueva vida.
“Se tienen el uno al otro y pueden pasar por esta carga juntos. Tienen más posibilidades de protegerse a sí mismos. Tuve que enfrentar las cosas por mi cuenta”, agregó.
A los padres de Turpin se les prohibió contactar a sus hijos, quienes permanecen en el hospital para recibir tratamiento.
La semana pasada, el fiscal de distrito del condado de Riverside, Mike Hestrin, dijo que los investigadores se habían enterado de que los niños estaban aislados unos de otros y encerrados en habitaciones diferentes en pequeños grupos, según el periódico The Sun.
Varias personas se ofrecieron a adoptar a los 13 niños y jóvenes, dijo a la AFP Kimberly Trone, portavoz de los servicios sociales del condado de Riverside.
“Solo puedo hablar sobre esas ofertas que hemos recibido y muchas de ellas incluyen acoger a las 13 víctimas, tomando en cuenta por supuesto que todavía hay mucho a ser decidido y esas decisiones se tomarán en la corte”, señaló Trone, que dijo no estar autorizada para comentar el paradero de los niños o su estado de salud.