
Gobierno estatal y comunidades indígenas exigen suspensión del modelo por copiar diseño tradicional sin autorización.
Autoridades del estado mexicano de Oaxaca han acusado a Adidas de apropiación cultural, luego del lanzamiento de las sandalias “Oaxaca Slip-On”, un modelo diseñado en colaboración con el creativo estadounidense de raíces mexicanas Willy Chavarria. Según denuncias oficiales, el calzado reproduce sin permiso un diseño tradicional de la comunidad indígena de Villa Hidalgo Yalalag.
Isaías Carranza, diputado local de origen zapoteco, expresó en redes sociales que Adidas y Chavarria “se apropiaron de un diseño único de los huaraches tradicionales de Yalalag”, sin dar crédito ni solicitar autorización a los creadores originales. Por su parte, el gobernador Salomón Jara mostró imágenes del modelo durante una conferencia de prensa y afirmó que el diseño es una reinterpretación de un huarache típico de Oaxaca, anunciando posibles acciones legales contra el diseñador.
La Secretaría de las Culturas y Artes de Oaxaca también condenó el uso comercial no autorizado del diseño indígena, calificándolo como una violación a los derechos colectivos de los pueblos originarios. En un comunicado oficial, exigió la suspensión inmediata de la venta del modelo “Oaxaca Slip-On”, la apertura de un diálogo con la comunidad afectada y el reconocimiento público del origen del diseño.
Willy Chavarria, conocido por resaltar su herencia chicana en sus colecciones, se ha visto envuelto en controversias anteriormente. En junio, fue criticado por el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, quien lo acusó de “glorificar a criminales” durante un desfile en la Semana de la Moda de París, al presentar modelos tatuados en posturas que recordaban a los reclusos del Cecot, la prisión de máxima seguridad salvadoreña.
El caso de Adidas se suma a una larga lista de denuncias por apropiación cultural en México, donde diversas marcas internacionales han sido señaladas por replicar textiles, bordados y diseños indígenas sin reconocimiento ni beneficio económico para las comunidades. Entre ellas se encuentran la china Shein, la española Zara y la venezolana Carolina Herrera.
Las autoridades oaxaqueñas han reiterado que no están en contra de la difusión del arte indígena, siempre que haya respeto, consentimiento y retribución. La presión ahora está sobre Adidas para frenar la venta de las sandalias, entablar un diálogo con los pueblos afectados y sentar un precedente en el respeto a la propiedad cultural colectiva.
Este nuevo caso reabre el debate sobre el papel de las grandes marcas en la preservación, uso y comercialización del patrimonio cultural de los pueblos originarios en América Latina. N
(Con información de AFP)