Las víctimas mortales más frecuentes del covid-19, el virus que ha sacudido al mundo desde finales de 2019, son los niños menores de 5 años y los adultos mayores de 65. También este grupo etario es el que más posibilidades tiene de terminar hospitalizado o en terapia intensiva.
Por ello, de acuerdo con la Dra. Yéssika Moreno, directora de Asuntos Médicos para Pfizer en América Latina, la responsabilidad social y compartida de las personas entre los 6 y 64 años es vacunarse, pues, si acaso se contagian de covid-19, la vacuna contribuye a evitar que el virus mute, se fortalezca y se propague con mayor vigor.
Como se sabe, cuando el coronavirus ingresa en el cuerpo humano convierte el organismo en una especie de laboratorio donde muta y se vigoriza, razón por la cual es prácticamente imposible erradicarlo pese a los esfuerzos de la ciencia avanzada.
Si la persona contagiada no presenta comorbilidades y no es menor de 5 años ni mayor de 65, es muy probable que no padezca los síntomas ni consecuencias del covid-19, explica la especialista. Sin embargo, sí se convierte en una potencial fuente de contagio, cuya víctima puede ser precisamente la población de mayor riesgo mortal: los niños, los adultos mayores y las personas que padecen comorbilidades como obesidad, diabetes, cáncer, enfermedades respiratorias e hipertensión.
En tanto, cada día los laboratorios fabricantes de la vacuna invierten una cantidad importante de esfuerzo y recursos para actualizar su producto y que sea efectivo contra las nuevas variantes, pues es de saberse que, por ejemplo, el inóculo que se usó contra las cepas de 2020, 2021 y 2022 es prácticamente inservible contra las de 2024.
DURANTE 2024 EL VIRUS HA DEJADO 625 MUERTOS EN MÉXICO
“La parte más importante es saber que el covid-19 todavía existe”, confirma la Dra. Moreno. “La gente está cansada de escuchar de covid-19, algunos creen que ya no existe y otros ya ni le toman importancia, pero no se ha ido, sigue con nosotros y sigue produciendo casos”.
De acuerdo con la información más reciente de la Secretaría de Salud, solo en 2024 en México se han notificado 13,807 casos positivos de covid-19 y 625 defunciones.
“Sé que se piensa que la gente contagiada de covid-19 lo padece levemente y no llega al hospital y no se está muriendo. Pero las cifras nos demuestran que hay una gran cantidad de hospitalizaciones de pacientes muy pequeños y muy grandes”, agrega Yéssika Moreno, médica con más de dos décadas de experiencia en la industria farmacéutica en América Latina.
“Cuando se trata de personas mayores de 65 años casi el 100 por ciento de los contagiados de covid-19 terminan en hospitalización”, agrega. “Todavía tenemos gente que requiere una hospitalización debido a la enfermedad”.
Tras mostrar un informe elaborado por el gobierno de México, insiste en que los grupos etarios en donde se presentan los mayores fallecimientos es de personas de más de 65 años y menores de 5. “Son los pacientes que más hospitalizaciones están teniendo, terminan en una unidad de cuidados intensivos o lamentablemente fallecen por la enfermedad”.
En ese sentido, advierte que las personas excluidas de estos rangos de edades probablemente no terminen en un hospital, pero sí abren la puerta para que el virus mute e impacte en las poblaciones de alto riesgo, las cuales sí pueden terminar en una unidad de cuidados intensivos o fallecer.
APLICARSE LA VACUNA CONTRA EL COVID-19 PARA MINAR LAS MUTACIONES
“Cada persona infectada damos la posibilidad a que el virus mute en nuestro organismo”, exhibe Moreno. “Cada persona que se infecta es un centro de incubación para esa mutación, y esta es la más peligrosa para las poblaciones de riesgo, pues se convierte en una variante nueva que obviamente desconocemos: no sabemos su capacidad de transmisión ni su severidad”.
Por ello el mensaje a transmitir es: “Esto es una responsabilidad compartida porque si yo me infecto puedo dar pie a que alguien fallezca. De ahí la importancia de que cada persona, aunque no esté en un grupo de riesgo, tenga la responsabilidad de vacunarse y evitar que el virus continúe mutando”.
Desde su aparición, el coronavirus SARS-CoV-2 ha experimentado múltiples mutaciones. Estos cambios se han presentado sobre todo en la proteína spike, una de las cuatro que posee el virus. Para darnos una idea, solo ómicron, conocida como la madre de las variantes que circulan hoy en día, ha presentado más de 80 transformaciones.
“¿Qué significa esto?”, se cuestiona la experta. “Que este virus que conocimos en 2020 hoy no es el mismo, es totalmente diferente. El covid-19 sigue entre nosotros y sigue produciendo contagios, hospitalizaciones y muertes. Sin embargo, el prevenir que yo me contagie disminuye la posibilidad de que el virus cambie y continúe generando problemas”.
Como se mencionó líneas arriba, las vacunas que se desarrollaron en 2020 ya no funcionan hoy en día porque se diseñaron para atacar un virus que ya no existe; y no porque haya desaparecido, sino porque simplemente se transformó. De ahí la necesidad de que la población cuente con vacunas actualizadas que ataquen y combatan los virus que pululan en la actualidad.
UNA VACUNA CONTRA LA SUBVARIANTE JN.1 DEL COVID-19
En ese sentido, por ejemplo, hace unos días, el 18 de octubre, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) dio el visto bueno para comercializar en México la actualización de la vacuna de Pfizer.
Según la empresa farmacéutica, esta nueva versión del inóculo fue elegida y recomendada unánimemente para la subvariante JN.1 por el Comité Asesor sobre Vacunas y Productos Biológicos Relacionados de la Food and Drugs Administration (FDA) de Estados Unidos.
Esta autorización de la vacuna se presenta cuando el Sistema Mundial de Vigilancia y Respuesta a la Gripe, de la Organización Mundial de la Salud, registra un aumento de casos de covid-19 de 7.4 por ciento a 13 por ciento en 85 países. De acuerdo con este organismo, solo de mayo a junio de 2024 se ha notificado la muerte de más de 2,800 personas a causa de la enfermedad.
“Desde que empezó la pandemia escuchamos que el covid-19 llegó para quedarse; nunca se va a ir, nunca”, recuerda Yéssika Moreno. “Por ello debemos evitare que siga mutando y que produzca más muertes y hospitalizaciones”.
En ese sentido, insiste en que las medidas de prevención jamás deben olvidarse y que son necesarias para combatir cualquier enfermedad. Lavarse las manos, por ejemplo, no solo ayuda a evitar las enfermedades respiratorias, sino también las diarreas, las infecciones y la contaminación de los alimentos, entre otros.
NOS ACECHA UNA TORMENTA PERFECTA
“Lo mismo sucede con el protocolo para estornudar, que no cambia nunca”, agrega. “Volvimos a escucharlo cuando llegó la pandemia, pero existe desde hace mucho y debería ser así siempre porque la gripe común, la influenza y el virus respiratorio sincicial están aquí. Pandemia o no pandemia, el protocolo del estornudo debería ser siempre el mismo, estornudar en el ángulo del brazo o con un pañuelo desechable”.
La especialista considera que hoy en día existen las condiciones para que se forme una tormenta perfecta: “Porque tenemos influenza, covid-19 y virus respiratorios sinciciales. Pero volvemos a lo mismo: las medidas de prevención deben ser las mismas para todo, funcionan para los tres casos y muchos más”.
La conversación con la Dra. Moreno se ha desarrollado en las instalaciones de Medistik by Traxión, la compañía responsable del almacenaje y distribución de la vacuna Comirnaty covid-19 de Pfizer.
Ubicada en Toluca, Estado de México, la empresa cuenta con instalaciones diseñadas específicamente para el manejo del inóculo, cuya relevancia consiste en conservar la cadena de frío.
Estas instalaciones tienen la capacidad de almacenar unas 250,000 vacunas a menos de 75 grados centígrados. “Además de nuestra flota, que también conserva la cadena de frío, la bajísima temperatura nos permite asegurar el buen funcionamiento de la vacuna”, explica Rafael Figueroa, director general de la compañía.
“Son almacenes, son camiones, es una flota muy importante de cadena de frío”, agrega el directivo. “Contamos con una experiencia de más de 20 años que nos permite ofrecer soluciones logísticas integrales de vanguardia y una gran capacidad operativa”. N