Reducir la jornada laboral de 48 a 40 horas en México es un pendiente que tiene el sector empresarial con los trabajadores, consideró Elisa Ibáñez, contadora pública certificada.
Además, señaló que se puede ser productivo laborando menos horas de trabajo, una tendencia que se está replicando en muchos países.
“Tenemos una deuda con los empleados, si tenemos ese compromiso como humanidad y como sector empresarial mexicano, pero no nos esperemos (a que se apruebe la reforma), vayamos implementando con creatividad, pensando muchas maneras de lograr esos cambios, empezar como lo han hecho muchas empresas con programas piloto para reducir estas horas”, indicó Ibáñez.
En la actualidad la reforma laboral para disminuir la jornada de trabajo en México a 40 horas y dos días obligatorios de descanso se encuentra detenida en el Poder Legislativo, algo que se retomará probablemente cuando sesionen los nuevos diputados y senadores del periodo 2024 – 2030.
“La tendencia o el futuro de las jornadas es que si se logre una mayor productividad, una mejora en la calidad de vida de los trabajadores, una mejora en el negocio que es finalmente el objetivo por el cual trabajan juntos; los mejores colaboradores saben que si le va bien a su empresa a ellos les va a ir bien”, anotó la contadora pública certificada, Elisa Ibáñez.
La idea, añadió la profesionista, es lograr un equilibrio entre los factores de producción y una mayor productividad en el espacio de trabajo y para ello las estrategias a implementar son realizables al instante si se analizan los procesos internos que le llevan mucho tiempo a los empleados.
En países como Costa Rica, Chile, Estados Unidos, la Unión Europea, las jornadas de trabajo son menos extensas que en México, sin que haya resultados negativos para el sector empresarial.
“Si hay muchos factores que nos lleven para que ese cambio de jornada se vaya construyendo de manera que legislativamente sea paulatino y gradual, pero que en las empresas no nos esperemos a que llegue el 2025 porque esa reforma es inminente, que tarde o temprano yo les garantizó que se va a aprobar por un ámbito internacional en el que estamos y porque nos dimos cuenta que no es productivo”, concluyó Ibáñez. N