El presidente del Consejo Ciudadano de Seguridad Pública de Baja California, Roberto Quijano Sosa, calificó como una “indignación” el asesinato de la líder del colectivo de búsqueda en Tecate Angelita Meraz León, señalando que, la sociedad civil está “sumamente molesta” no solo por la muerte de la activista que buscaba a su hermano de manera legítima, sino también por los atentados en general hacia los elementos de seguridad pública, así como las amenazas que recibió en su momento la alcaldesa de Tijuana Montserrat Caballero Ramírez.
Consideró que, por parte del Gobierno del Estado, seguramente harán declaraciones donde asegurarán que realizarán investigaciones a fondo y localizarán a los culpables del homicidio. Sin embargo, “son discursos ya muy gastados”, los cuales ya hemos escuchado en innumerables ocasiones, sin mencionar que, la violencia e inseguridad que se vive en las calles de Tijuana sigue siendo un problema que ocurre todos los días en la ciudad.
Señaló que, mientras el gobierno de Baja California no reconozca que las estrategias de seguridad que implementan no funcionan, el problema no se va a solucionar. Asimismo, aún con la llegada de más elementos de la guardia nacional a la región, ellos mismos han manifestado que, solo vienen a realizar patrullajes, así como búsquedas de algunas personas que fomentan la violencia.
“Ellos no investigan, ellos no realizan labores que son mucho más profundas particularmente en el tema preventivo. Entonces, vuelvo a comentarlo, mientras por parte de la autoridad estatal, federal y municipal no se reconozca la dimensión del problema no se va a resolver”, agregó.
Roberto Quijano indicó que, el Consejo Ciudadano no saben que estrategias y actividades realizarán los elementos de la guardia nacional en la ciudad, enfatizando que, desde hace años, es a través de los medios de comunicación donde se enteran de los patrullajes que realiza la guardia nacional aquí en la región.
Informó que, hasta hace un año Baja California ocupaba el lugar número 28 a nivel mundial en efectividad y productividad por parte de la Fiscalía del Estado según datos del Sistema Nacional de Seguridad Pública, puntualizando que, es evidente esta situación, cuando la Fiscalía está totalmente desmantelada, infiltrada, sin equipamiento e instalaciones, siendo el ejemplo más claro cuando un tijuanense va a presentar una denuncia a una agencia del ministerio público, donde tiene que esperar varias horas para ser atendido y teniendo como resultado una falta de seguimiento en la mayoría de investigaciones. N