Una técnica que identifica la acumulación de depósitos anormales de proteínas relacionados con el párkinson podría ayudar en la detección temprana y desempeñar un papel clave en el diagnóstico clínico y la caracterización del trastorno, según un estudio publicado este jueves 13 de abril en la revista The Lancet Neurology.
El estudio concluyó que la acumulación de la proteína alfa-sinucleína en el cerebro está vinculada a ciertas formas de párkinson. Ello abre la puerta a un diagnóstico precoz de esta enfermedad.
La elevada presencia de esta proteína en el líquido cefalorraquídeo que baña el cerebro es “de una gran precisión para detectar las formas típicas de la enfermedad de párkinson”, según el estudio.
EL SELLO PATOLÓGICO DEL PÁRKINSON
La investigación confirma que la técnica, conocida como ensayo de amplificación de semillas de α-sinucleína (αSyn-SAA), puede detectar con precisión a las personas con la enfermedad neurodegenerativa. A su vez, sugiere que puede identificar a las personas en riesgo y a aquellas con síntomas tempranos y no motores antes del diagnóstico.
La presencia de agregados de proteína α-sinucleína mal plegada en el cerebro es el sello patológico de la enfermedad de Parkinson. “Reconocer la heterogeneidad en la patología subyacente entre los pacientes con párkinson ha sido un gran desafío”, dijo el coautor principal del estudio, Andrew Siderowf, de la Escuela de Medicina Perelman de la Universidad de Pensilvania, en Estados Unidos.
“Identificar un biomarcador efectivo para la patología de la enfermedad de Parkinson podría tener profundas implicaciones en la forma en que tratamos la enfermedad. Ello podría hacer posible diagnosticar a las personas antes, identificar los mejores tratamientos para diferentes subgrupos de pacientes y acelerar los ensayos clínicos”, dijo Siderowf.
UNA PROTEÍNA PERMITE DETECTAR LA ENFERMEDAD
El estudio de Lacent Neurology tiene como novedad que se realizó en cientos de pacientes y confirmó que la presencia elevada de esta proteína permite detectar la enfermedad. Sin embargo, todavía se está lejos de poder implementar una prueba “biológico” de la enfermedad, que actualmente solo se diagnostica por los síntomas visibles.
Entre los 1,123 participantes en el análisis se encontraban personas con un diagnóstico de enfermedad de Parkinson y personas en riesgo con variantes genéticas (GBA y LRRK2) vinculadas a la afección. También se incluyeron los llamados participantes prodrómicos. Estas personas tenían síntomas no motores (recontonos del sueño o pérdida del olfato) que pueden ser signos tempranos de párkinson. N
(Con información de AFP y The Hindu)